Manual de legislación europea sobre los derechos del niño

Modalidades alternativas al cuidado familiar y la adopción
vivienda y de higiene de las familias y asesorarlas sobre el modo de mejorar
su situación, no se optó por esta alternativa. Si bien las razones para la
acogida de los niños eran relevantes, no eran suficientes y las autoridades
no hicieron lo suficiente para ayudar a los demandantes a superar sus dificultades
a través de otras medidas. El TEDH apreció una vulneración del
artículo 8 del CEDH y tomó nota de las conclusiones del Comité de Derechos
del Niño de la ONU, que señalaba que el principio por el cual el interés
superior del niño ha de ser una consideración primordial no estaba aún
adecuadamente definido y reflejado en toda la legislación checa, las resoluciones
judiciales y las políticas que afectan a los niños.
Ejemplo. En el asunto Saviny contra Ucrania 212 , los hijos de los demandantes
habían sido entregados en acogida por la falta de recursos económicos
de los padres y por considerar el tribunal nacional que sus circunstancias
personales ponían en riesgo las vidas, la salud y la educación moral de los
niños. Al evaluar el caso, el TEDH cuestionó la idoneidad de las pruebas en
que las autoridades nacionales basaron sus conclusiones y consideró que
no había suficiente información sobre el grado de asistencia social facilitada.
Esta información hubiera sido pertinente para valorar si las autoridades
habían cumplido su obligación de mantener unida a la familia y habían explorado
suficientemente la eficacia de otras medidas menos drásticas antes
de separar a los niños de sus padres. Además, los niños no habían sido
escuchados por el tribunal en ninguna fase del procedimiento. En suma,
aunque los motivos alegados por las autoridades nacionales competentes
para retirar la custodia de los hijos eran relevantes, no eran suficientes
para justificar una interferencia tan grave en la vida familiar de los demandantes.
El tribunal sostuvo, por tanto, que había existido una violación del
artículo 8 del CEDH.
El TEDH exige, de acuerdo con el artículo 8 del CEDH, que las decisiones que afectan
al respeto de la vida familiar se ajusten a ciertas salvaguardas procesales. El
proceso decisorio (administrativo y judicial) sobre medidas que interfieran en la
vida familiar debe, según el Tribunal, ser justo y respetar los intereses protegidos
por dicho artículo. El aspecto que debe tenerse en cuenta a la luz del artículo
8 es si «los padres han intervenido en el proceso decisorio [...] en la medida
suficiente para proporcionarles la protección precisa de sus intereses 213 ». Esto
212 TEDH, Saviny contra Ucrania, nº 39948/06, 18 de diciembre de 2008.
213 TEDH, W. contra Reino Unido, nº 9749/82, 8 de julio de 1987, apdo. 64.
107