26.11.2014 Views

Delumeau-Jean-El-Cristianismo-Del-Futuro

Delumeau-Jean-El-Cristianismo-Del-Futuro

Delumeau-Jean-El-Cristianismo-Del-Futuro

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

en la conducta perfecta. Asimismo una madre puede dar un<br />

alimento perfecto a su recién nacido, pero éste es todavía inca­<br />

, I paz de recibir un alimento impropio de su edad; así Dios podía<br />

dar desde el inicio la perfección al hombre, pero era incapaz de<br />

recibirla porque sólo era un niño 20.<br />

Estas afirmaciones, que figuran en el Adversus haereses (IV,<br />

38,1), se completan más adelante (IV, 40,1): «<strong>El</strong> hombre había elegido<br />

la desobediencia por inadvertencia y no por malicia» 21. En<br />

términos modernos podríamos decir que Adán y Eva, según Teófilo<br />

e Ireneo, se apresuraron demasiado. Siendo niños, quisieron<br />

COnOcer una ciencia que no les habría sido accesible sino cuando<br />

hubieran crecido.<br />

Según esta concepción, Ireneo hace que recaiga en el tentador<br />

la responsabilidad de la falta primera. Además, Dios ha «devuelto<br />

contra el autor de la enemistad la que éste había querido<br />

fomentar contra él» 22. En cambio él ha tenido piedad del hombre.<br />

No hay rastro, lo vemos, en el discurso ireneano, de la masa de<br />

perdición agustiniana, ni de una condena global al infierno que<br />

hubiera merecido la humanidad pecadora. Teófilo e Ireneo estiman<br />

que Dios ha expulsado a los hombres del paraíso terrenal<br />

para permitirles expiar y ha dejado hacer a la muerte para que el<br />

pecado no fuese inmortal. Teófilo escribe: «Por parte de Dios fue<br />

un gran beneficio para el hombre no mantenerlo para siempre en<br />

situación de pecado sino infligirle, en cierto modo, una especie<br />

de destierro arrojándolo del paraíso: así el castigo debía permitir<br />

al hombre reparar su pecado en un tiempo determinado y, una<br />

vez castigado, recibir una nueva vocación» 23. Ireneo sostiene aún<br />

más explícitamente:<br />

20 IRENEO, Contra las herejías. Libro IV, Productos Compactos, 1993 [orig.:<br />

Contre les hérésies, IV, París, Le Cerf, «Sources chrétiennes», 1965,2 vol.: H. pp.<br />

945-947].<br />

21 Ibíd., p. 981.<br />

22 Ibíd.<br />

23 TEÓFILO DE ANTIOQUÍA, AutóllCO, o. C., p. 163 (H, 26).

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!