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812 Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo
TABLA 62.2. Valoración bioquímica del estado nutricional.
TIPO DE VALORACIÓN
MARCADORES
Antropometría
Peso, talla, índice de masa corporal (IMC)
Cadera, cintura, índice cintura-cadera
Pliegue cutáneo tricipital
Circunferencia del brazo, circunferencia muscular del brazo
Bioquímica:
• Proteínas
Albúmina, prealbúmina, transferrina, RBP
• Lípidos
Colesterol total, HDL-colesterol, LDL-colesterol, triglicéridos
• Hidratos de carbono
Glucosa
• Vitaminas Hidrosolubles: C, B 1, B 2, B 6, B 12, biotina
Ácido nicotínico, pantoténico y fólico
Liposolubles: A, D, E, K
• Minerales:
Zinc, cobre, manganeso, selenio, hierro, yodo
Sodio, potasio, calcio, fósforo, magnesio
Parámetros hematológicos
Parámetros inmunológicos
Bioimpedanciometría
Hematimetría
Linfocitos
Masa grasa, masa libre de grasa
Agua corporal (total, intra y extracelular)
Gasto energético basal
Abreviaturas: RBP: Retinol Binding Protein.
cambios evolutivos es una solución adecuada, pero no
siempre practicable.
Finalmente, la variabilidad inter e intraobservador
inherente a todos estos parámetros constituye un importante
inconveniente. Esta variación puede reducirse
asegurando la cualificación de los investigadores de
campo encargados de realizar las mediciones.
En cuanto a las determinaciones bioquímicas, deben
tenerse en cuenta los siguientes aspectos para garantizar
la validez de la investigación:
— La selección del parámetro bioquímico más adecuado
a los objetivos del estudio. Por ejemplo, la
malnutrición o la ganancia de peso pueden determinarse
mediante la monitorización de diferentes
proteínas plasmáticas, que serán elegidas
en función de su vida media dependiendo de que
se pretendan valorar los cambios subagudos
(prealbúmina) o los crónicos (albúmina) (11) .
— La selección de la muestra biológica y/o de la
metodología más adecuada para la determinación
de cada analito, distinguiendo dos objetivos
que suelen requerir abordajes distintos: la
valoración del estado nutricional (incluyendo
las alteraciones funcionales y la depleción celular)
o la estimación de la ingesta (12) . Siguiendo
con el ejemplo de las proteínas, el balance nitrogenado,
la creatinina urinaria o las proteínas
plasmáticas informan del estado nutricional,
mientras que la urea en orina lo hace de la ingesta.
— Es necesario minimizar la variabilidad preanalítica
(debida a la variación biológica interindividual
que obedece a diferencias fisiológicas en
la absorción, el turn-over tisular y/o la excreción
del nutriente). Para ello debe cumplirse estrictamente
el protocolo de obtención y procesamiento
de las muestras más adecuado en cada
caso, lo que es especialmente importante para
las vitaminas y oligoelementos (13) , pudiendo ser
necesario incluso la eliminación de las muestras
incorrectas del estudio, con criterios de exclusión
definidos a priori.
— En lo que se refiere a la determinación propiamente
dicha, deben citarse con claridad los métodos
y tecnologías utilizados, refiriendo, así
mismo, la calidad analítica informada por el laboratorio
(en términos de coeficiente de variación)
para cada técnica.
— La utilización de valores de referencia validados
para cada población es fundamental para la correcta
interpretación de los resultados, de la misma
manera que eran fundamentales en el caso
de las medidas antropométricas.