Obras escogidas [tomo 5] - Stolpkin
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SER PROMOTORES DE LA REVOLUCIÓ.<br />
9 de octubre de 1957.<br />
Discurso pronunciado por el camarada Mao Tse-tung en la III Sesión Plenaria Ampliada del VIII Comité<br />
Central del Partido Comunista de China.<br />
Esta reunión ha sido un éxito: Una sesión plenaria<br />
ampliada del Comité Central como ésta, con la<br />
participación de camaradas de los comités<br />
provinciales y prefecturales, constituye en realidad<br />
una conferencia de cuadros de tres niveles, y es útil<br />
para clarificar orientaciones, intercambiar<br />
experiencias y aunar voluntades.<br />
En adelante, quizá sea necesario celebrar una vez<br />
al año este tipo de reuniones, pues en un país tan<br />
grande como el nuestro el trabajo es muy<br />
complicado. El año pasado, por no haber efectuado<br />
una reunión así, pagamos el pato con la aparición de<br />
una desviación de derecha. El año antepasado se<br />
registró un ascenso, pero al siguiente sobrevino un<br />
relajamiento de los esfuerzos. Desde luego, habiendo<br />
realizado el año pasado el VIII Congreso, no nos<br />
quedó tiempo para más. Cuando celebremos otras<br />
reuniones como la presente, podríamos hacer que se<br />
sumaran a ellas unos cuantos secretarios de comités<br />
distritales y de comités de distritos urbanos de<br />
algunas grandes ciudades, elevando la cifra de<br />
participantes, digamos, en unos cien. Propongo que<br />
cada provincia reúna, a su vez, una conferencia<br />
provincial de cuadros de tres o cuatro niveles que<br />
incluya a cierto número de cuadros de cooperativas,<br />
para discutir y dejar en claro los problemas. Este es<br />
el primer punto.<br />
Segundo. Algunas palabras sobre la rectificación.<br />
Hay que abrir campo a las opiniones audazmente,<br />
radicalmente, decididamente, y proceder a las<br />
reformas de igual manera. Debemos tomar tal<br />
determinación. Ahora bien, ¿será necesaria, además<br />
de esto, otra campaña contra los derechistas, una<br />
vigorosa campaña en este sentido? No, pues la lucha<br />
contra los derechistas está bien encarrilada y en<br />
algunos lugares ha finalizado ya. Actualmente, debe<br />
ponerse el acento en la apertura de opiniones y la<br />
introducción de reformas en la base, o sea, en los tres<br />
niveles de distrito, territorio y cantón. En cuanto a<br />
los niveles central y provincial (municipal), aunque<br />
en algunos departamentos sigue siendo necesaria la<br />
apertura de opiniones, hay que poner el énfasis en las<br />
reformas.<br />
Este año, las masas han creado una forma<br />
revolucionaria, una forma de lucha de masas que<br />
consiste en la gran competencia de ideas, la gran<br />
apertura de opiniones, el gran debate y el empleo del<br />
dazibao. La revolución actual ha encontrado una<br />
forma que se ajusta muy bien a su contenido. Esta no<br />
podía haber surgido en el pasado. Como en ese<br />
tiempo nos dedicábamos a la guerra, a los cinco<br />
grandes movimientos 1 y a las tres grandes<br />
transformaciones 2 , era imposible que apareciera esta<br />
forma de debate no apurado. Entonces habría sido<br />
inadmisible dedicar todo un año a un debate no<br />
apurado, a la presentación de hechos y la exposición<br />
de argumentos. Pero ahora se lo puede hacer. Hemos<br />
encontrado esta forma, que se ajusta al contenido de<br />
la actual lucha de masas, al contenido de la actual<br />
lucha de clases y al tratamiento correcto de las<br />
contradicciones en el seno del pueblo. Si<br />
aprehendemos esta forma, en adelante será mucho<br />
más fácil manejar las cosas. Tanto los problemas<br />
importantes relativos a lo correcto y lo erróneo como<br />
los de segundo orden, tanto los problemas de la<br />
revolución como los de la construcción, podrán ser<br />
resueltos empleando esta forma de competencia,<br />
apertura y debate; además, su solución será así más<br />
rápida. La izquierda entra en la competencia de ideas<br />
y en el debate no sólo con el centro, sino también, y<br />
de manera completamente abierta, con la derecha y,<br />
en el campo, con los terratenientes y los campesinos<br />
ricos. Ya que no tenemos miedo al "desprestigio",<br />
hemos publicado en la prensa absurdos tales como<br />
"el Partido Comunista lo monopoliza todo", "el<br />
Partido Comunista debe abdicar" y "debe bajarse del<br />
palanquín". Acabamos de "subir al palanquín", y ya<br />
los derechistas exigen que "nos bajemos". Esta forma<br />
de gran competencia, gran apertura, gran debate y<br />
dazibao es la que más favorece el despliegue de la