albii de

A donde estaba el mancebo
llegó una gitana linda,
con dos luceros por ojos
y cara tan peregrina,
que al mirarla , dulcemente
se queda el alma cautiva ,
presa de aquellos encantos .
que dan gloria á Andalucía.
Al ver la hermosa sirena
la poca galantería
del encubierto galán
que no da paso á la niña,
le dice con voz suave
y flechándole la vista ,
— «Vaya, ¿dejazté pazá?
¿ ó á jecho ozté portería
de la entra de ezta cayeja
onde está María Zuntízima '?
¿Tampoco dise ozté náa?...
Poz dé caye arque camina,
que no tengo gana en ver
cza cara é cartulina.
— ¡ Dezvergouzáa czlá por Dioz
la mosuela chavaliya 1
¡ Jezucrizto! güelvazé,
zino quiere que le endiña
ezte pinrrel que ez é jierro
á eze trazte de arropía.
¡Ea, viento frezco , á otra paite!
— ¿ De verda? ¡ me dazté riza I
¿quié vé zumersé, onpilichi,
como tersio la maiitiya
y en menoz é un zanti amen
me pazo pol toa zu crizma ?
¿Lo quie ozté vé?
— Zonzi vela,
yá najarze, oña Merlinda;
que no zea é pone er león
á reñí con la gayina.
¡ Zobre que no me he enfáar!...
Vayase la muñequiya,
vaya á concluí cr decháo
con la tia vieja é la miga.
— Y ozté á zacá boqueronez
á lazplayaz é Meliyo,
que dico en ozté unaz trasas
como de gente mú fina.
— Y ozté eztá moztrando ó legua
que remanga la carniza,
cuando rosa la orasion
á toáz la zoraz er día.
— ¡ Z¡ jaze ozté con zu cuelpo
la czpina é zanta Lusia I
— Y la zeñá der Pimpoyo
paesc ozté cuando va á miza,
polque yeba zu zenaguaz
la zaraudelaz poztizaz.
— ; Vayazté zo ezgalichao !
— ¡ Jui, que pelra tan royiza!
¡zí paese ozté un calamar
que de entre Ioz deoz ze ezlíza!.
— Y ozté zc ezcapó el ¡nfiegno
regüerlo en una torsía,
cuando echó juera er demonio
lo que naide ya quería.
— ¿Ozlé ze acuerda, monona,
del convento é recogíaz?
— Y cuando eztuyo en preziyo,
¿ ze acuerdazté lo que basia?
— Yo meacueldo, Mari Choto,
cuando la (ia Lampariyaz
la vebó a/Je cá er marqurz
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