19.05.2013 Views

TORREJÓN DE ARDOZ: UNA HISTORIA VIVA - Ayto Torrejon de ...

TORREJÓN DE ARDOZ: UNA HISTORIA VIVA - Ayto Torrejon de ...

TORREJÓN DE ARDOZ: UNA HISTORIA VIVA - Ayto Torrejon de ...

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

<strong>TORREJÓN</strong> <strong>DE</strong> <strong>ARDOZ</strong>:<strong>UNA</strong> <strong>HISTORIA</strong> <strong>VIVA</strong><br />

En cuanto a la ubicación <strong>de</strong> las sepulturas <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la Iglesia Parroquial hemos<br />

comprobado que a partir <strong>de</strong>l entierro <strong>de</strong> Teresa Pérez en 1715 63 , mujer <strong>de</strong><br />

Francisco <strong>de</strong> Burgos, se empieza a hacer constar qué lugar <strong>de</strong> la Iglesia correspon<strong>de</strong><br />

a cada sepultura. Se divi<strong>de</strong> el templo en dos partes: la que mira a poniente,<br />

o pared <strong>de</strong>l Sol, y la que mira al norte, o pared <strong>de</strong> la sierra. La numeración<br />

abarca <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el 1 al 12 en ambas pare<strong>de</strong>s, y se sigue manteniendo la graduación<br />

<strong>de</strong> las sepulturas a , siendo más baratas cuanto más se alejaban <strong>de</strong>l Altar Mayor.<br />

Asimismo, al analizar los Libros Parroquiales <strong>de</strong> Torrejón <strong>de</strong> Ardoz, nos encontramos<br />

con las calificaciones hechas a personas difuntas como “pobres”,<br />

“muy pobres” o “pobres <strong>de</strong> solemnidad”. En la Parroquia <strong>de</strong> San Juan<br />

Evangelista existía un anejo a la Iglesia, don<strong>de</strong> se les daba sepultura, como se<br />

explicó anteriormente 64 .<br />

A partir <strong>de</strong> 1785, y por las obras que se venían realizando en la Iglesia, se ve<br />

la necesidad <strong>de</strong> enterrar a los difuntos en las partes hábiles <strong>de</strong>l santo recinto,<br />

acudiendo a la sacristía y otros lugares que estaban reservados a estamentos <strong>de</strong><br />

or<strong>de</strong>n superior (sacerdotes en la Capilla Mayor, o Capillas laterales pagando los<br />

100 reales <strong>de</strong> vellón).<br />

Con la inauguración <strong>de</strong>l Cementerio en 1788, Torrejón <strong>de</strong> Ardoz abandona<br />

una <strong>de</strong> las prácticas más combatidas en el siglo XVIII: enterrar a los difuntos en<br />

las Iglesias. Fray Miguel <strong>de</strong> Acero 65 dice que será necesario formar un grueso<br />

volumen si queremos referir los ejemplos infaustos que han sucedido por causa<br />

<strong>de</strong>l hedor pestilencial <strong>de</strong> las sepulturas. “Es indudable que la costumbre <strong>de</strong> enterrar<br />

los muertos en poblado perjudica mucho a la salud y vida <strong>de</strong> los vivos por<br />

los hálitos que se exhalan <strong>de</strong> los cadáveres, que son tanto más copiosos cuanto<br />

más cerrado está el sitio, y más cálydo el ayre por la mucha frequencia <strong>de</strong> las<br />

personas, principalmente cuando se remueve la tierra en que se han podrido los<br />

cadáveres, o se abre alguna sepultura, sale un hedor quasi envenenado con peligro<br />

manifiesto <strong>de</strong> la salud <strong>de</strong> los vivos”.<br />

Las cartas pastorales <strong>de</strong> Esteban Carlos <strong>de</strong> Lomenie <strong>de</strong> Brienne, obispo <strong>de</strong><br />

Tolosa, y <strong>de</strong> Francisco Lucerna-Rorengo <strong>de</strong> Rorá, obispo <strong>de</strong> Turín, <strong>de</strong> 1775 y<br />

1777, respectivamente, fueron muy significativas. En ellas se establecían limitaciones<br />

a los enterramientos en las iglesias, pudiendo sólo tomar sepultura allí<br />

“/…/ y en parajes que haremos reconocer a este efecto /…/ los arzobispos, los<br />

obispos, los párrocos y rectores, los regulares y las monjas, /…/, por consiguiente,<br />

todos los <strong>de</strong>más cadáveres serán llevados <strong>de</strong> aquí a<strong>de</strong>lante a los cementerios<br />

públicos” 66 .<br />

a Esta costumbre se mantiene hasta los años 30, y a partir <strong>de</strong> entonces se <strong>de</strong>ja <strong>de</strong> anotar la sepultura que<br />

ocupa el difunto, aunque no su grado <strong>de</strong> enterramiento, y <strong>de</strong>saparece <strong>de</strong>finitivamente <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 1740.<br />

182

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!