15.05.2013 Views

La Vida Social en el Coloniaje - andes

La Vida Social en el Coloniaje - andes

La Vida Social en el Coloniaje - andes

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

pintores, decoradores, carpinteros, etc. En este s<strong>en</strong>tido de la creación estética y <strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral de toda<br />

la obra civilizadora de España <strong>en</strong> América, debe mucho de lo bu<strong>en</strong>o a la obra de los ignacianos. El<br />

viajero D'Orbigny, atestigua de la exist<strong>en</strong>cia de hermosas obras de pintura <strong>en</strong> las misiones de<br />

Moxos, Chiquitos, Encarnación, Trinidad y otros lugares. Es esta segunda etapa de la pintura que<br />

se difunde anónimam<strong>en</strong>te. El pintor es un hombre que realiza los sueños estético-r<strong>el</strong>igiosos de las<br />

muchedumbres que viv<strong>en</strong> su fe. Esta expresión d<strong>el</strong> anonimato <strong>en</strong> la pintura de imág<strong>en</strong>es fue<br />

introducida por los sacerdotes hispánicos para <strong>el</strong> establecimi<strong>en</strong>to de cultos locales utilizando <strong>el</strong><br />

"método litúrgico" de fom<strong>en</strong>tar la aparición de los Santos y de la Virg<strong>en</strong> María <strong>en</strong> breñas ocultas y<br />

de difícil acceso, cuyas pinturas o estatuas eran descubiertas por niños o pastores. Fue <strong>el</strong> mismo<br />

sistema que se empleó <strong>en</strong> España para la def<strong>en</strong>sa d<strong>el</strong> catolicismo, cuando la invasión sarrac<strong>en</strong>a.<br />

En esta forma "aparecieron" y se "<strong>en</strong>contraron" <strong>en</strong> diversas localidades de España imág<strong>en</strong>es<br />

Marianas que luego recibían la advocación de Virg<strong>en</strong> d<strong>el</strong> Pilar, de la Paloma, d<strong>el</strong> Rocío, de las<br />

Nieves, de la Paz, etc. Lo notable d<strong>el</strong> caso es que bu<strong>en</strong>a parte de las vírg<strong>en</strong>es de América hicieron<br />

su aparición <strong>en</strong> los sitios <strong>en</strong> que los indios adoraban a sus dioses. Así la Virg<strong>en</strong> de Copacabana.<br />

En la tercera etapa de la vida artística de !a Colonia altoperuana, ofrece <strong>en</strong> Potosí la<br />

pres<strong>en</strong>cia de artistas españoles y extranjeros, que la visitaron arrastrados <strong>en</strong> los oleajes de<br />

muchedumbres forasteras que aum<strong>en</strong>taban su población, no obstante de las restricciones vig<strong>en</strong>tes<br />

<strong>en</strong> la época. No existe dato alguno de los notables pintores italianos que estuvieron <strong>en</strong> Lima,<br />

Medoro, y Alesio, hubies<strong>en</strong> visitado Potosí, pero, no sería raro que atraídos por <strong>el</strong> imán de la<br />

riqueza de la ciudad maravillosa, hubies<strong>en</strong> viajado a la Villa Imperial. Pocos nombres de estos<br />

maestros extranjeros y españoles han llegado hasta nosotros. Recuérdase a Fernández, <strong>el</strong> pintor y<br />

escultor español maestro d<strong>el</strong> indio Tito Yupanqui, Juan Moy<strong>en</strong> pintor francés que visitó Potosí, y<br />

fue expulsado de la ciudad por ord<strong>en</strong> de la Santa Inquisición. Es indudable que Moy<strong>en</strong> no debió ser<br />

exilado de Potosí por sólo su condición de francés. Su pintura no coincidió con <strong>el</strong> clima estético de<br />

los c<strong>en</strong>sores, pudi<strong>en</strong>do ser esta la causa de su persecución <strong>en</strong> la misma forma que fue víctima <strong>en</strong><br />

México otro pintor francés d<strong>el</strong> mismo siglo XVII Simón Per<strong>en</strong>ys.<br />

Aparte de las influ<strong>en</strong>cias de los maestros, no fue extraña la acción de las propias<br />

autoridades, muchas de las cuales arzobispos, gobernadores e int<strong>en</strong>d<strong>en</strong>tes, ornam<strong>en</strong>taban sus<br />

equipajes con las preciosas cargas de cuadros artísticos, valorizados con firmas luminosas que<br />

ll<strong>en</strong>aban con la gloria de su nombre toda la época y también de otros m<strong>en</strong>ores, pero también<br />

brillantes. Martínez y V<strong>el</strong>a, refiere que se importaban pinturas y obras de arte proced<strong>en</strong>tes de Italia<br />

<strong>en</strong> <strong>el</strong> siglo XVIII. El aranc<strong>el</strong> de aduana colonial, consigna liberación de tasa a todas las obras de<br />

arte de pintura, naturalm<strong>en</strong>te autorizadas por la c<strong>en</strong>sura. Este hecho nos prueba <strong>el</strong>ocu<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te<br />

la posible internación de cuadros y su influ<strong>en</strong>cia desde <strong>el</strong> punto de vista d<strong>el</strong> ambi<strong>en</strong>te artístico de<br />

Potosí. "Ni de las pinturas -dice Gazophilacio Regium Peruvicum- deb<strong>en</strong> alcabala por la exc<strong>el</strong><strong>en</strong>cia<br />

de este arte imitador de la naturaleza, poesía muda y armonía sil<strong>en</strong>ciosa: así lo obtuvieron <strong>en</strong> juicio<br />

s<strong>en</strong>t<strong>en</strong>cioso los pintores de Madrid". Este hecho también nos prueba <strong>el</strong>ocu<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te la posible<br />

internación de cuadros a Potosí y su influ<strong>en</strong>cia desde <strong>el</strong> punto de vista estético <strong>en</strong> <strong>el</strong> ambi<strong>en</strong>te de<br />

la Villa Imperial. Anotemos también que la ciudad d<strong>el</strong> Cerro Rico conoció la gran pintura española<br />

sincrónica con la vitalidad de su economía y con la exaltación r<strong>el</strong>igiosa de construcción, exornado y<br />

decorado de iglesias. Los cuadros d<strong>el</strong> siglo de oro español, eran pues, familiares a las otras g<strong>en</strong>tes<br />

de la Villa Imperial y a sus pintores.<br />

En los cuadros de los pintores d<strong>el</strong> Alto Perú s<strong>en</strong>timos la ardi<strong>en</strong>te piedad y <strong>el</strong>egancia de<br />

líneas de Luís Morales <strong>el</strong> divino, hay <strong>en</strong> <strong>el</strong>los un soplo sabio de los pinc<strong>el</strong>es de Alonso Sánchez<br />

Co<strong>el</strong>lo, asoma la voluntad de crear, la simplicidad de tonos, la vida psicológica exaltada <strong>en</strong> la<br />

deformación d<strong>el</strong> Greco, vibra <strong>el</strong> realismo, la vida cromática y la plástica de Murillo, se percibe <strong>el</strong><br />

calor humano d<strong>el</strong> g<strong>en</strong>io de V<strong>el</strong>ásquez <strong>en</strong>amorado de la forma y de una naturaleza que es superada<br />

por <strong>el</strong> arte, existe la s<strong>en</strong>sación de un reflejo de la pintura de José de Ribera <strong>en</strong> <strong>el</strong> realismo de sus<br />

figuras atorm<strong>en</strong>tadas, los frailes de Zurbarán y la torturante apocalíptica pintura de Valdez Leal.<br />

163

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!