Advertencia
Advertencia
Advertencia
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Contribuciones a la Historia del Arte en Ecuador. Volumen I<br />
Quito. La historia del arte en el Perú comienza, pues, en la misma época que en las naciones arriba<br />
citadas es decir, por el año de 1840, más o menos.<br />
En cuanto a las artes en Venezuela, oigamos lo que dice el doctor J. Semprún, en su estudio acerca<br />
de La pintura en Venezuela 15 .<br />
El estudio de los orígenes de la pintura venezolana puede ser asunto para un estudio curioso, pero<br />
árido, que no cabría en un simple esbozo. La tradición y la historia conservan ciertos nombres oscuros,<br />
más meritorios ciertamente por la generosidad del esfuerzo realizado que por el fruto obtenido.<br />
Mientras las artes literarias alcanzaron auge y brillo en los primeros años de la República para<br />
oscurecerse luego y recobrar su esplendor en las postrimerías del siglo, la pintura sólo vino a tener<br />
cultivadores afortunados a fines de la pasada centuria.<br />
No hay duda; Quito se puede vanagloriar con justo título de haber sido el único lugar de todas<br />
los colonias americanas, en que el arte tuvo su asiento permanente. La pintura y escultura fueron<br />
cultivadas con ventaja desde los primeros tiempos de su fundación y establecimiento. En el Archivo<br />
de la Corte Suprema de Quito se conserva un proceso seguido por el cacique de Cacha (Riobamba),<br />
Chagpalbay, en el cual estaba el retrato de este indio. Está vestido a la española, dice el doctor Pablo<br />
Herrera en las notas que le comunicó al padre Cappa para sus estudios críticos acerca de la dominación<br />
española en América, su colorido es regular y el dibujo bastante correcto . Desgraciadamente este<br />
retrato ya no existe. Después del doctor Herrera, estudió ese proceso el señor don Jacinto Jijón y<br />
Caamaño, actual director de la Academia Nacional de Historia, y ya no encontró entre sus páginas el<br />
retrato en referencia! Y para afirmar tan rotundamente que Quito fue la única y sola sede artística en los<br />
tiempos coloniales en la América toda, nos apoyamos en el hecho de que en Estados Unidos no empezó<br />
el arte sino en el siglo XVIII; pues, el primer pintor, Fraser, es de 1782 y su primer escultor, Powers,<br />
de 1805, sin que en tiempos anteriores hubiere habido artista alguno digno de llamar la atención.<br />
En cambio «consta, dice muy bien González Suárez, que en Quito hubo, desde muy antiguo, una<br />
escuela de pintura, pues ya en el siglo décimo sexto se habla de pintores quiteños, y el hermano<br />
Hernando de la Cruz, jesuita del Colegio de Quito, tenía un taller de pintura en el cual enseñaba a<br />
algunos alumnos» .<br />
El padre Cappa, que recorrió todas las repúblicas americanas que formaron el antiguo gran imperio<br />
colonial de España, para su obra Estudios críticos acerca de la dominación española en América ,<br />
15 Veáse el Boletín de la Unión Panamericana . Diciembre de 1919 y enero de 1920. ( N. del A. )<br />
54