You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
que trabajaban en secreto.<br />
Todos los días yo iba a echar un vistazo al<br />
cuarto del disruptor, un recinto sin ventanas<br />
situado exactamente debajo del laboratorio<br />
principal. Nunca encontré allí a nadie; una capa<br />
de polvo cubría el armazón y los cables del<br />
aparato, como si nadie lo hubiera tocado en las<br />
últimas semanas.<br />
En verdad, no encontraba a nadie en ninguna<br />
parte, y no conseguía localizar a Snaut; lo llamaba<br />
a la cabina de radio, y no había respuesta. Alguien,<br />
ciertamente, vigilaba los movimientos de la Estación<br />
¿pero quién? Yo lo ignoraba, y aunque parezca<br />
extraño, opinaba que la cuestión no me<br />
concernía. Que el océano no reaccionara, también<br />
me dejaba indiferente; a tal punto que luego de<br />
dos o tres días ya no esperaba nada, ni sentía<br />
miedo; había olvidado por completo el<br />
experimento y las posibles reacciones. Me pasaba el<br />
día sentado, ya en la biblioteca, ya en la cabina.<br />
Harey, sombra discreta, me acompañaba siempre.<br />
Yo sentía con claridad que había un cierto<br />
malestar entre nosotros, y que mi apatía, esa<br />
tregua del pensamiento, no podía prolongarse<br />
mucho más. Por supuesto, de mí dependía que<br />
hubiera un cambio en nuestras relaciones, pero yo<br />
rechazaba la idea misma de cambio; era incapaz<br />
de tomar una decisión. Todo lo que había en la<br />
Estación, y en particular mis relaciones con Harey,<br />
me parecía frágil e insustancial: la más mínima<br />
modificación podía romper ese peligroso equilibrio<br />
y precipitar un desastre. ¿De dónde me venían tales<br />
impresiones? Yo no lo sabía. Y lo más extraño era<br />
que Harey estaba pasando también por una<br />
experiencia semejante. Cuando hoy evoco<br />
aquellos días, pienso que esa impresión de<br />
incertidumbre, de prórroga, ese presentimiento de<br />
un cataclismo inminente eran provocados por una<br />
presencia invisible, que se había aposentado en la<br />
Estación, y que se manifestaba también en los<br />
sueños. No habiendo tenido nunca ni antes ni<br />
después, visiones semejantes, decidí anotarlas,<br />
transcribirlas aproximadamente, dentro de los límites<br />
de mi vocabulario, advirtiendo que sólo se trataba de<br />
ideas generales y apenas fragmentarias, casi por<br />
182