13.07.2015 Views

2013 157 Revista de las causas y consecuencias

2013 157 Revista de las causas y consecuencias

2013 157 Revista de las causas y consecuencias

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Mr. Polk, al ascen<strong>de</strong>r a la presi<strong>de</strong>ncia, encontró otra cuestiónmucho más importante que estaba pendiente entre el Canadáy los Estados Unidos en torno al territorio <strong>de</strong> Oregón. En sudiscurso inaugural ante el Congreso, el Presi<strong>de</strong>nte Polk expresóla opinión <strong>de</strong> que el <strong>de</strong>recho <strong>de</strong> los Estados Unidos a todaesa vasta región hasta los 54° 40’ <strong>de</strong> latitud norte, era precisoe indispensable, y rechazó toda transacción que se le ofrecíasin permitir siquiera que se hiciese referencia a un posible arbitraje.Pero no por ello envió ejército alguno a ocupar lo queél <strong>de</strong>claraba ser nuestra frontera norte. Antes bien emprendiónegociaciones con la Gran Bretaña y renunció a 5° 40’ <strong>de</strong> territorioque él, Mr. Polk, había antes afirmado que nos pertenecían“por hechos y argumentos irrefragables”, según tratadoque el general Cass <strong>de</strong>claró ante el Senado que fue ‘obra<strong>de</strong>l Gobierno inglés’, y que el Senado ratificó sin suprimirle otildarle una sola t ni puntuarle una sola i, <strong>de</strong>jándolo tal cualfue concebido por los ingleses.¡Ah, pero la Gran Bretaña es una nación po<strong>de</strong>rosa y Méxicoun país débil! El territorio entregado por los Estados Unidosestaba en el Norte y sería libre para siempre, en tanto que elterritorio <strong>de</strong>l cual nos apo<strong>de</strong>ramos en el Sur, se <strong>de</strong>stinaba aser por siempre una región <strong>de</strong> esclavos”. (19)Como el lector apreciará en esta obra, es <strong>de</strong> tal contun<strong>de</strong>ncia lacon<strong>de</strong>na <strong>de</strong> William Jay, que en el Capítulo XXIII, “SE PROSIGUELA GUERRA CON FINES DE CONQUISTA”, cuando invadierontodo el territorio nacional y el ejército americano ocupó la ciudad<strong>de</strong> México, reconoce:“Asesinamos a los mexicanos en el Río Gran<strong>de</strong>; pero como norecibimos en cambio pago alguno, nos pusimos entonces abombar<strong>de</strong>ar Veracruz, y matamos más mexicanos. Con ellocreció nuestra <strong>de</strong>manda <strong>de</strong> in<strong>de</strong>mnización. Como no la recibimostampoco, emprendimos la marcha <strong>de</strong> cientos <strong>de</strong> mil<strong>las</strong>hasta la ciudad <strong>de</strong> México y matamos a otros miles más. Claroestá que esto agregó nuevas cifras a nuestra reclamación,y proseguimos sembrando <strong>de</strong>solación y muerte, hasta quedarperfectamente in<strong>de</strong>mnizados por todo el dinero, la molestia yla sangre que habíamos gastado en la magna tarea <strong>de</strong> llenara una República hermana <strong>de</strong> dolor, <strong>de</strong> lamentos, <strong>de</strong> luto. Lai<strong>de</strong>a <strong>de</strong> matar así a otro pueblo y sacrificar la vida <strong>de</strong> nuestrospropios ciudadanos, con el solo propósito <strong>de</strong> que se nos27

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!