30.09.2016 Views

America en la Profecia por Elena White

Los orígenes peculiares de Estados Unidos y su hegemonía en los asuntos mundiales se quedan indiscutibles. Como superpotencia nacida de Europa, la historia se ha resplandecido por todas partes. Pronosticada desde la antigüedad, una miríada de las represiones, las revoluciones y las reformas le inspiró al primer grupo de peregrinos a establecerse en una nueva tierra prometida de la libertad. Este libro permite al lector a comprender el destino único de América y el papel dominante, mientras asediada por maquinaciones políticas y espirituales. Claramente, esta lectura revelará las manipulaciones, los movimientos y las intervenciones que han moldeado a América, presagiando su cooperación para socavar los mismos valores, más queridos anteriormente. Al mismo tiempo, disemina rayos de esperanza y confianza a medida que se estalla un giro de acontecimientos.

Los orígenes peculiares de Estados Unidos y su hegemonía en los asuntos mundiales se quedan indiscutibles. Como superpotencia nacida de Europa, la historia se ha resplandecido por todas partes. Pronosticada desde la antigüedad, una miríada de las represiones, las revoluciones y las reformas le inspiró al primer grupo de peregrinos a establecerse en una nueva tierra prometida de la libertad. Este libro permite al lector a comprender el destino único de América y el papel dominante, mientras asediada por maquinaciones políticas y espirituales. Claramente, esta lectura revelará las manipulaciones, los movimientos y las intervenciones que han moldeado a América, presagiando su cooperación para socavar los mismos valores, más queridos anteriormente. Al mismo tiempo, disemina rayos de esperanza y confianza a medida que se estalla un giro de acontecimientos.

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

predijo su propia muerte a los discípulos. Los acontecimi<strong>en</strong>tos re<strong>la</strong>cionados con el fin del tiempo de gracia<br />

y <strong>la</strong> preparación para el tiempo de angustia han sido pres<strong>en</strong>tados con c<strong>la</strong>ridad. Pero hay miles de personas<br />

que compr<strong>en</strong>d<strong>en</strong> estas im<strong>por</strong>tantes verdades de modo tan incompleto como si nunca hubies<strong>en</strong> sido<br />

reve<strong>la</strong>das. Satanás procura arrebatar toda impresión que podría llevar a los hombres <strong>por</strong> el camino de <strong>la</strong><br />

salvación, y el tiempo de angustia no los <strong>en</strong>contrará listos.<br />

Cuando Dios manda a los hombres avisos tan im<strong>por</strong>tantes que <strong>la</strong>s profecías los repres<strong>en</strong>tan como<br />

proc<strong>la</strong>mados <strong>por</strong> santos ángeles que vue<strong>la</strong>n <strong>por</strong> el cielo, es <strong>por</strong>que él exige que toda persona dotada de<br />

intelig<strong>en</strong>cia les preste at<strong>en</strong>ción. Los terribles juicios que Dios pronunció contra los que adoran <strong>la</strong> bestia y<br />

su imag<strong>en</strong> (Apocalipsis 14:9-11) deberían inducir a todos a estudiar dilig<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te <strong>la</strong>s profecías para<br />

saber lo que es <strong>la</strong> marca de <strong>la</strong> bestia y cómo pued<strong>en</strong> evitar<strong>la</strong>. Pero <strong>la</strong>s muchedumbres cierran los oídos a<br />

<strong>la</strong> verdad y prefier<strong>en</strong> fábu<strong>la</strong>s. El apóstol Pablo, refiriéndose a los últimos días, dijo: “Porque v<strong>en</strong>drá tiempo<br />

cuando no sufrirán <strong>la</strong> sana doctrina”. 2 Timoteo 4:3. Ya hemos <strong>en</strong>trado de ll<strong>en</strong>o <strong>en</strong> ese tiempo. Las<br />

multitudes se niegan a recibir <strong>la</strong>s verdades bíblicas <strong>por</strong>que estas contrarían los deseos de los corazones<br />

pecaminosos y mundanos; y Satanás les pro<strong>por</strong>ciona los <strong>en</strong>gaños <strong>en</strong> que se comp<strong>la</strong>c<strong>en</strong>.<br />

Pero Dios t<strong>en</strong>drá <strong>en</strong> <strong>la</strong> tierra un pueblo que sost<strong>en</strong>drá <strong>la</strong> Biblia y <strong>la</strong> Biblia so<strong>la</strong>, como piedra de<br />

toque de todas <strong>la</strong>s doctrinas y base de todas <strong>la</strong>s reformas. Ni <strong>la</strong>s opiniones de los sabios, ni <strong>la</strong>s deducciones<br />

de <strong>la</strong> ci<strong>en</strong>cia, ni los credos o decisiones de concilios tan numerosos y discordantes como lo son <strong>la</strong>s iglesias<br />

que repres<strong>en</strong>tan, ni <strong>la</strong> voz de <strong>la</strong>s mayorías, nada de esto, ni <strong>en</strong> conjunto ni <strong>en</strong> parte, debe ser considerado<br />

como evid<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> favor o <strong>en</strong> contra de cualquier punto de fe religiosa. Antes de aceptar cualquier doctrina<br />

o precepto debemos cerciorarnos de si los autoriza un categórico “Así dice Jehová”.<br />

Satanás trata continuam<strong>en</strong>te de atraer <strong>la</strong> at<strong>en</strong>ción hacia los hombres <strong>en</strong> lugar de atraer<strong>la</strong> hacia Dios.<br />

Hace que el pueblo considere como sus guías a los obispos, pastores y profesores de teología, <strong>en</strong> vez de<br />

estudiar <strong>la</strong>s Escrituras para saber <strong>por</strong> sí mismo cuáles son sus deberes. Dirigi<strong>en</strong>do luego <strong>la</strong> intelig<strong>en</strong>cia de<br />

esos mismos guías, puede <strong>en</strong>tonces también <strong>en</strong>caminar <strong>la</strong>s multitudes a su voluntad.<br />

Cuando Cristo vino a predicar pa<strong>la</strong>bras de vida, el vulgo le oía con gozo y muchos, hasta de <strong>en</strong>tre<br />

los sacerdotes y gobernantes, creyeron <strong>en</strong> él. Pero los principales de los sacerdotes y los jefes de <strong>la</strong> nación<br />

estaban resueltos a cond<strong>en</strong>ar y rechazar sus <strong>en</strong>señanzas. A pesar de salir frustrados todos sus esfuerzos<br />

511

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!