15.05.2013 Views

Miguel Rocha Vivas - Universidad del Valle

Miguel Rocha Vivas - Universidad del Valle

Miguel Rocha Vivas - Universidad del Valle

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

238<br />

II Literatura nasa<br />

comer solo raíces, el terrajero llegó a la hacienda y no encontró nada;<br />

el terrateniente había abandonado la hacienda. Entonces el terrajero se<br />

quedó con su tierra para siempre.<br />

(Plaza, 1994: 27-29)<br />

el oso1 Cuentan que hace mucho tiempo, cuando aún el hombre no había<br />

empezado acabar con los animales y estos tenían el don de pensar y<br />

tomar decisiones, que se encontraba una mujer preparando la comida,<br />

y cerca de allí desde un sitio oculto, un oso la vigilaba. El oso decidió<br />

ir por ella; la llevó a la selva y en un árbol muy grande que encontró,<br />

la hizo subir. Allí la mantuvo durante mucho tiempo, tanto que de comida<br />

solo llevaba carne cruda porque los osos nunca han aprendido a<br />

cocinar. Pasaron los días y a la mujer se le acabó la ropa. Y el oso, muy<br />

atrevido, le había engendrado un hijo, así que a los seis meses dio a luz.<br />

Fue un hermoso niño; claro, salió a la mamá, humano; porque<br />

si hubiera sido oso habría sido un verdadero lío alimentarlo. El niño<br />

creció muy rápido y aprendió a hablar como su madre, a la que [en]<br />

ocasiones le decía:<br />

–Mamá, estoy muy aburrido solo, encima de este árbol.<br />

1. El relato <strong>del</strong> oso raptor se encuentra muy difundido en los Andes, especialmente<br />

en Perú y Bolivia, donde abundan mitos, cuentos y leyendas sobre el hijo <strong>del</strong> oso. En<br />

versiones de los pijaos <strong>del</strong> sur <strong>del</strong> Tolima el oso también sube a la muchacha a un árbol;<br />

lo característico de la presente versión es que el padre encierra al hijo en una cueva, y<br />

que éste fabrica un arma de piedra para matar al padre. Usualmente el hijo <strong>del</strong> oso –el<br />

famoso Ukuku o Juanito– no se adapta a la escuela ni a la «civilización» y su huida al<br />

bosque es un retorno a los orígenes (aunque el hombre-oso luce aquí como un colono,<br />

peinilla [machete] en mano). La pelea y persecución <strong>del</strong> hombre que mataba a los trabajadores<br />

<strong>del</strong>ata los conflictos por la tenencia de la tierra entre blancos e indígenas. Es<br />

muy interesante la reelaboración <strong>del</strong> motivo <strong>del</strong> descenso al inframundo: una cueva en<br />

donde se esconde el hombre blanco protegido por un peón y rodeado de muchachas<br />

bonitas. En el relato el inframundo es la guarida de un asesino, y reemplaza a la míticamente<br />

célebre barriga <strong>del</strong> monstruo que se devora al héroe. El hijo <strong>del</strong> oso sale de la<br />

cueva (como lo hizo cuando estaba pequeño), pero no puede matar al blanco, que es de<br />

cierta forma «invencible», aunque mata al peón (su sombra) y recupera algunas de las<br />

muchachas raptadas. Como en la oraliteratura indígena y mestiza <strong>del</strong> sur <strong>del</strong> Tolima, «el<br />

héroe sale premiado con su princesa». En esta versión nasa, el hijo <strong>del</strong> oso es mucho más<br />

violento de lo usual, e incluso amenaza de muerte a la serpiente y al tigre que vigilan<br />

la cueva. Las mulas aparecen en otras versiones de los Andes centrales de este ciclo de<br />

relatos <strong>del</strong> oso raptor.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!