Pideme-lo-que-quieras-ahora-y-siempre-Megan-Maxwellcrispetes.cat_
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Björn se acerca a él, y <strong>lo</strong>s dos me observan. Me devoran con la mirada. Estoy<br />
tumbada en la mesa, desnuda, y con <strong>lo</strong>s cubrepezones y el tanga roto aún puesto. Björn<br />
sonríe, y tras pasear su caliente mirada por mi cuerpo, murmura mientras uno de sus dedos<br />
tira del tanga roto:<br />
—Excitante.<br />
Expuesta ante el<strong>lo</strong>s y deseosa de ser su objeto de <strong>lo</strong>cura, subo mis pies a la mesa,<br />
me impulso y me co<strong>lo</strong>co mejor. Llevo uno de mis dedos a mi boca, <strong>lo</strong> chupo y, ante la<br />
atenta mirada de <strong>lo</strong>s hombres a <strong>lo</strong>s <strong>que</strong> me estoy ofreciendo sin ningún decoro, <strong>lo</strong><br />
introduzco en mi húmeda vagina. Sus respiraciones se aceleran, y yo meto y saco el dedo<br />
de mi interior una y otra vez. Me masturbo para el<strong>lo</strong>s. ¡Oh, sí!<br />
Sus ojos me devoran. Sus cuerpos están deseosos de poseerme, y yo de <strong>que</strong> <strong>lo</strong><br />
hagan. Los tiento. Los reto con mis movimientos. Eric pregunta:<br />
—Jud, ¿llevas en el bolso <strong>lo</strong>...?<br />
—Sí —le corto antes de <strong>que</strong> termine la frase.<br />
Eric coge mi bolso. Lo abre y saca el vibrador en forma de pintalabios, y se<br />
sorprende al ver también la joya anal. Sonríe y se acerca a mí.<br />
—Date la vuelta y ponte a cuatro patas sobre la mesa.<br />
Hago caso. Mi dueño me ha pedido eso, y yo, gustosa, <strong>lo</strong> obedezco. Björn me da un<br />
azotito en el trasero, y luego me <strong>lo</strong> estruja con sus manos mientras Eric mete la joya en mi<br />
boca para <strong>que</strong> la lubri<strong>que</strong> con mi saliva. Los vuelvo <strong>lo</strong>cos, <strong>lo</strong> sé. Una vez <strong>que</strong> Eric saca la<br />
joya de mi boca, me abre bien las piernas e introduce la joya en mi ano. Entra de tirón.<br />
Jadeo, y más cuando noto <strong>que</strong> la gira produciéndome un placer maravil<strong>lo</strong>so mientras me<br />
tocan.<br />
Con curiosidad miro hacia atrás y observo <strong>que</strong> <strong>lo</strong>s dos miran mi cu<strong>lo</strong>, mientras sus<br />
a<strong>lo</strong>cadas manos se pasean por mis mus<strong>lo</strong>s y mi vagina.<br />
—Jud —dice Eric—, ponte como estabas antes.<br />
Me vuelvo a tumbar sobre la mesa mientras noto la joya en mi interior. Cuando mi<br />
espalda descansa de nuevo en el escritorio, Eric me abre las piernas, me expone a <strong>lo</strong>s dos, y<br />
después se mete entre ellas y besa el centro de mi deseo. Me <strong>que</strong>mo.<br />
Su lengua, exigente y dura, toca mi clítoris, y yo salto.<br />
—No cierres las piernas —pide Björn.<br />
Me agarro con fuerza a la mesa y hago <strong>lo</strong> <strong>que</strong> me pide, mientras Eric me coge por<br />
las caderas y me encaja en su boca. Gemidos de placer salen de mí, y mientras disfruto con<br />
el<strong>lo</strong>, observo <strong>que</strong> Björn se quita <strong>lo</strong>s panta<strong>lo</strong>nes y se pone un preservativo.<br />
De pronto, Eric se para, le entrega a Björn el pe<strong>que</strong>ño vibrador en forma de<br />
pintalabios, sale de entre mis piernas, y su amigo toma su lugar. Eric se pone a mi lado, me<br />
echa el pe<strong>lo</strong> hacia atrás y sonríe. Me mima y me besa. Björn, <strong>que</strong> ha entendido el mensaje,<br />
enciende el vibrador. Eric, cargado de erotismo, murmura:<br />
—Vamos a jugar contigo y después te vamos a follar como anhelas.<br />
Las manos de Björn recorren mis piernas. Las toca. Se acomoda entre ellas y pasa<br />
uno de sus dedos por mis húmedos labios vaginales. Después, dos, y cuando <strong>lo</strong>s ha abierto<br />
para dejar al descubierto mi ya hinchado clítoris, pone el vibrador sobre él, y yo grito. Me<br />
muevo. A<strong>que</strong>l contacto tan directo me vuelve <strong>lo</strong>ca.<br />
—No cierres las piernas, preciosa —insiste Björn, y me <strong>lo</strong> impide.<br />
Eric me besa. Pone una de sus manos sobre mi abdomen para <strong>que</strong> no me mueva,<br />
mientras Björn aprieta el vibrador en mi clítoris, y yo grito cada vez más. Esto es asolador.<br />
Tremendo. Voy a exp<strong>lo</strong>tar. Mi ano está lleno. Mi clítoris, en<strong>lo</strong><strong>que</strong>cido. Mis pezones, duros.