Libro electrónico: Cartas a un joven católico - Diócesis de Canarias
Libro electrónico: Cartas a un joven católico - Diócesis de Canarias
Libro electrónico: Cartas a un joven católico - Diócesis de Canarias
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
* * *<br />
A veces los críticos no prestan atención a lo que, a mi parecer, es el hilo más obvio e<br />
inconf<strong>un</strong>dible que atraviesa toda la obra Retorno a Bri<strong>de</strong>shead. Alg<strong>un</strong>os, centrados en la<br />
brillante evocación <strong>de</strong> la vida estudiantil <strong>de</strong> Oxford en los años veinte, lo conciben como otro<br />
ejercicio <strong>de</strong> la sátira social, tan típica <strong>de</strong> Waugh. En <strong>un</strong>a Inglaterra privada <strong>de</strong> cualquier lujo<br />
durante y <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la Seg<strong>un</strong>da Guerra M<strong>un</strong>dial, hay quienes leen Bri<strong>de</strong>shead como<br />
evocación nostálgica <strong>de</strong> <strong>un</strong> s<strong>un</strong>tuoso pasado, mientras que otros consi<strong>de</strong>ran la obra como <strong>un</strong>a<br />
nueva manifestación <strong>de</strong>l amaneramiento <strong>de</strong> Waugh. Todas esas interpretaciones pier<strong>de</strong>n <strong>de</strong><br />
vista lo principal. El tema <strong>de</strong> Retorno a Bri<strong>de</strong>shead es exactamente lo que Waugh dijo que era<br />
en el prólogo a la edición revisada: «Los efectos <strong>de</strong> la gracia divina en <strong>un</strong> grupo <strong>de</strong> personajes<br />
diferentes, pero estrechamente vinculados». Es <strong>un</strong>a novela sobre la conversión; pero <strong>un</strong>a<br />
conversión entendida como disposición a subir los escalones, muchas veces <strong>de</strong>masiado<br />
empinados, <strong>de</strong> la escala <strong>de</strong>l amor.<br />
Des<strong>de</strong> otra óptica, Charles Ry<strong>de</strong>r es <strong>un</strong> personaje que va creciendo <strong>de</strong>s<strong>de</strong> los afectos más bajos<br />
hasta <strong>un</strong>os amores siempre más difíciles, pero siempre más auténticos. Con todo, la condición<br />
católica <strong>de</strong> Evelyn Waugh acierta realmente cuando se llega a enten<strong>de</strong>r que Charles alcanza el<br />
más puro <strong>de</strong> los amores –el amor <strong>de</strong> Dios en Cristo– no simplemente partiendo <strong>de</strong> los amores<br />
más bajos, sino a través <strong>de</strong> ellos.<br />
Privado <strong>de</strong> amor en su niñez por <strong>un</strong> padre frío y distante, Charles sube peldaño a peldaño la<br />
escalera <strong>de</strong>l amor a través <strong>de</strong> su amistad con Sebastian, a<strong>un</strong>que esa amistad implica <strong>un</strong> juego<br />
con lo que Ry<strong>de</strong>r <strong>de</strong>scribirá más tar<strong>de</strong> como <strong>un</strong>a «perversión... que ocupa <strong>un</strong>o <strong>de</strong> los primeros<br />
lugares en el catálogo <strong>de</strong> pecados mortales». Pero el amor que comparten Charles y Sebastian<br />
es <strong>un</strong> amor inmaduro, corno admite el propio Ry<strong>de</strong>r. Oxford, la casa <strong>de</strong> Bri<strong>de</strong>shead y Venecia,<br />
en compañía <strong>de</strong> Sebastian, fueron <strong>un</strong>a breve satisfacción <strong>de</strong> lo que yo n<strong>un</strong>ca había<br />
experimentado, <strong>un</strong>a infancia alegre». Sebastian, por temor a per<strong>de</strong>r esa alegría <strong>de</strong> la infancia,<br />
se refugia en el alcoholismo (y terminará por encontrar <strong>un</strong>a casa como portero, <strong>un</strong>as veces<br />
borracho y otras veces sobrio, en <strong>un</strong> monasterio <strong>de</strong>l Norte <strong>de</strong> África). El miedo <strong>de</strong> Sebastián al<br />
amor adulto y la responsabilidad que implica no <strong>de</strong>struyen su amistad con Ry<strong>de</strong>r, pero limitan<br />
su finalidad y su prof<strong>un</strong>didad.<br />
El amor <strong>de</strong> Ry<strong>de</strong>r a Julia es más elevado y más noble que su amor a Sebastian, porque es <strong>un</strong><br />
amor dirigido a su verda<strong>de</strong>ra finalidad, a<strong>un</strong>que es <strong>un</strong> amor adúltero por ambas partes. Pero<br />
también ese amor tiene sus límites. Es <strong>un</strong> amor como válvula <strong>de</strong> escape, como esfuerzo por<br />
crear con Julia en Bri<strong>de</strong>shead <strong>un</strong>a Arcadia nueva y solitaria, como aquella Arcadia <strong>de</strong> la vida en<br />
Oxford en los primeros momentos <strong>de</strong> amistad con Sebastian. Sin embargo, a<strong>un</strong>que tratan <strong>de</strong><br />
convencerse <strong>de</strong> que ese es el amor por el que tanto han suspirado, Julia parece inefable e<br />
inexplicablemente triste. La inoport<strong>un</strong>a (a<strong>un</strong>que exacta) observación <strong>de</strong> Bri<strong>de</strong>y sobre el hecho<br />
<strong>de</strong> que «vive en pecado» con Charles provoca en Julia <strong>un</strong> estallido <strong>de</strong> cólera con muchas<br />
lágrimas. Esos estallidos se repiten, y Julia empieza poco a poco a reconocer que, a<strong>un</strong>que su<br />
cólera parece dirigida a su amante, el objetivo real es ella misma. La dramática muerte <strong>de</strong> Lord<br />
Marchmain hace ver a Julia y a Charles que su amor, por prof<strong>un</strong>do que sea, jamás podrá ser<br />
<strong>un</strong>a nueva Arcadia, jamás podrán escapar a ese mítico paraíso, lejos <strong>de</strong> la verdad <strong>de</strong>l amor y<br />
sus exigencias. Al reconocer esa realidad, Julia y Charles afrontan el último peldaño, el más