Importancia de la viruela, gastroenteritis aguda y paludismo ... - Oulu

mucho, y si no que se lo pregunten a tantos investigadores en situaciones precarias. Por
ello, muchas gracias.
Debo decir que sin la Sociedad Finlandesa de Genealogía (Suomen
Sukututkimusseura) este trabajo no habría sido posible. Quiero expresar por tanto mi más
sincero agradecimiento a todos sus colaboradores y voluntarios que han dedicado
innumerables horas a la informatización de registros parroquiales. Querría también desde
aquí felicitarlos por su gran labor.
Muchos escollos han ido surgiendo a lo largo del proceso de la tesis, y siempre he
tenido la suerte de encontrar gente generosa cerca que me ha echado una mano.
A perderle pánico a los miles de datos y a pastorearlos como es debido me ayudó
André Costopoulos, para el que mis agradecimientos no se limitan a este punto, sino que
se prolongan a muchos otros consejos que me ha dado a lo largo de toda esta
investigación.
A continuación, si alguien me enseñó a odiar un poco menos el ArcView ese fue Jari
Okkonen, que con su seriedad y profesionalidad me dio las pistas necesarias para no
ahogarme en un mar de mapas.
Päivi Honkavaara ha sido mi traductora particular. Juntas hemos sufrido un poco y
reído mucho intentando sacarle alguna información a viejos textos en sueco, que se nos
resistían, y de qué manera.
Miguel Anjo lo es todo en el plano personal, pero en el profesional no ha sido menos
importante. Junto a él, los lenguajes de programación y las bases de datos imponen
menos, las búsquedas complicadas se vuelven sencillas, los problemas grandes se dividen
en pequeñitos y se van solucionando. Juntos también vencimos a los malvados
documentos maestros cuando intentaban sacarnos de la carretera al final del trayecto.
Cuando creía que iba a tirar la toalla y a saltar detrás, el Departamento de
Antropología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Granada me abrió las
puertas de su hospitalidad. En esta ciudad encontré refugio en el que escribir durante un
par de meses que resultaron vitales. Por ello debo dar las gracias a D. Miguel Botella y a
toda la gente del laboratorio, que me acogió al borde del ataque de nervios, en especial a
Rosa M. Maroto Benavides por su cariño y su fuerza. Un recuerdo apretado va también
para Jesús Oyalbis Chacón.
Cómo no agradecer a los revisores, Massimo Livi-Baci y a Angel Baltanás toda su
paciencia y su buen hacer.
Gracias también a mi amiga y filóloga Beatriz Ruiz Arranz por corregir, en la medida
de lo posible, estas cerca de cuatrocientas páginas de terrible castellano.
Finalmente quiero expresar mi gratitud a todos mis amigos de Madrid, de Oulu y de
Ginebra por todo su cariño y reiterarles el mío.
A todos gracias, y hasta la próxima.
Xaviera Torres Joerges, octubre de 2005