El Padre Nuestro y el Credo - Centro Nacional de Catequesis
El Padre Nuestro y el Credo - Centro Nacional de Catequesis
El Padre Nuestro y el Credo - Centro Nacional de Catequesis
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
EL PADRENUESTRO Y EL CREDOson nuestros hermanos viendo a Dios sin las miradas interesadas o egoístas,sin aqu<strong>el</strong>las miradas que hieren u ofen<strong>de</strong>n: “Los ojos <strong>de</strong> los santos tendránuna potencia mayor (…) para que vean las cosas incorporales. Quizá esagran potencialidad <strong>de</strong> la visión fue dada por un momento al santo patriarcaJob, cuando dice (…) ‘Ahora te veo con mis propios ojos’ (Jb. 42,5). Noobstante, pue<strong>de</strong>n también enten<strong>de</strong>rse los ojos d<strong>el</strong> corazón, <strong>de</strong> los cualesdice <strong>el</strong> Apóstol: ‘Tened iluminados los ojos <strong>de</strong> vuestro corazón’ (Ef. 1,18). Yque Dios será visto con estos ojos es una verdad que no duda ningún cristiano,que acepte las palabras d<strong>el</strong> Maestro: ‘Bienaventurados los limpios <strong>de</strong>corazón, porque verán a Dios ’ (Mt. 5,8)” 520 .Contemplar a Dios será equivalente a dialogar con Él más familiarmenteque como lo hacía Adán antes <strong>de</strong> su pecado en <strong>el</strong> Paraíso. Con todajusticia se ha dicho que mejor que cualquiera <strong>de</strong> todos los bienes que loshombres disfrutaremos está <strong>el</strong> <strong>de</strong> conversar continuamente con Cristo 521 .Bien que será una realidad no sólo con Él sino con <strong>el</strong> <strong>Padre</strong> en <strong>el</strong> Espíritu <strong>de</strong>Cristo.2. Alabanza a Dios.Todos los hombres verán a Dios y <strong>el</strong> hombre total lo contemplará,no sólo <strong>el</strong> alma sino también <strong>el</strong> cuerpo y al verlo lo glorificarán, lo alabaránporque entonces podrán contemplarlo tal como es Él: “Allí <strong>de</strong>scansaremosy contemplaremos, contemplaremos y amaremos, amaremos y alabaremos:¡He aquí lo que habrá al fin sin fin!” 522La alabanza es fruto d<strong>el</strong> gozo y éste <strong>de</strong> la verdad. No se le dará verda<strong>de</strong>raalabanza a nadie más que a Él: “No se dará <strong>el</strong> honor a ningúnindigno” 523 , ni se alabará como lo hacen los aduladores o como quien estáen <strong>el</strong> error. Se superarán las falsas alabanzas al hermano, esas que se realizanpor intereses <strong>de</strong>sviados y esos honores que se tributan por una pretensiónpecaminosa. <strong>Nuestro</strong>s <strong>de</strong>seos tendrán un único interés y como únicameta: Dios, “quien será visto sin fin, amado sin hastío, (alabado) sincansancio” 524 .Si Dios se convertirá en <strong>el</strong> único objeto <strong>de</strong> adoración, todos seremosante Él iguales, no habrá quien esté más alto ni quien esté más abajo, nohabrá superior ni inferior, <strong>de</strong>saparecerán las pretensiones y las envidias quenos hacen ubicarnos por encima <strong>de</strong> los <strong>de</strong>más, y libres absolutamente novamos a apetecer otra cosa más que a Dios. Y entonces se logrará vivir laperfecta comunidad.* * *Propiedad <strong>de</strong> CENACAT136520 Agustín <strong>de</strong> Hipona, La ciudad <strong>de</strong> Dios XXII, 29,3.521 “Mejor que todo esto, sin embargo, será <strong>el</strong> po<strong>de</strong>r <strong>de</strong> conversar continuamente con Cristo, encompañía <strong>de</strong> los áng<strong>el</strong>es, con los arcáng<strong>el</strong>es y con las potesta<strong>de</strong>s superiores”. Juan Crisóstomo,Adhortatio ad Theodorum lapsum 11, PG 47.522 Agustín <strong>de</strong> Hipona, La ciudad <strong>de</strong> Dios XXII,30,5523 Agustín <strong>de</strong> Hipona, La ciudad <strong>de</strong> Dios XXII,30,1.524 Agustín <strong>de</strong> Hipona, La ciudad <strong>de</strong> Dios XXII,30,1.