12.07.2015 Views

El Padre Nuestro y el Credo - Centro Nacional de Catequesis

El Padre Nuestro y el Credo - Centro Nacional de Catequesis

El Padre Nuestro y el Credo - Centro Nacional de Catequesis

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

I. Creo en <strong>el</strong> Espíritu SantoCristo ha salvado al hombre rev<strong>el</strong>ándole <strong>el</strong> misterio <strong>de</strong> Dios en plenitud.Un misterio que se ha manifestado en la perfecta generosidad d<strong>el</strong><strong>Padre</strong> y también en la plena acogida d<strong>el</strong> Hijo. Es en esta r<strong>el</strong>ación <strong>de</strong> Dar-Recibir, en la que se establece un misterio <strong>de</strong> amor para compartir.<strong>El</strong> Hijo lo recibe todo d<strong>el</strong> <strong>Padre</strong> y da a los hombres –según lo po<strong>de</strong>mosmirar en su humanidad – <strong>el</strong> don d<strong>el</strong> Espíritu. Don que contiene en sítodos los dones: “Pero <strong>el</strong> Hijo, según la bondad d<strong>el</strong> <strong>Padre</strong>, dispensa comoministro al Espíritu Santo a quien quiere y como <strong>el</strong> <strong>Padre</strong> quiere (…) Por esoes múltiple la presencia interior d<strong>el</strong> Espíritu <strong>de</strong> Dios, y <strong>el</strong> profeta Isaías laenumera en siete formas <strong>de</strong> ministerio, que han <strong>de</strong>scansado en <strong>el</strong> Hijo <strong>de</strong>Dios, a saber, <strong>el</strong> Verbo en su venida humana” 323 .Convenía, por tanto, que las “primicias d<strong>el</strong> Espíritu Santo <strong>de</strong> losbautizados se dieran primero a la humanidad d<strong>el</strong> Salvador, quien da tangran gracia.”324 <strong>El</strong> Espíritu es, en la humanidad <strong>de</strong> Cristo, Don que se <strong>de</strong>rrama.La humanidad d<strong>el</strong> Verbo lo da porque lo posee en sí. Po<strong>de</strong>mos reconocerque Jesús antes <strong>de</strong> su Resurrección y Ascensión al ci<strong>el</strong>o, concedía esosdones d<strong>el</strong> Espíritu a quienes entraban en contacto con Él, un contacto <strong>de</strong>terminadopor <strong>el</strong> espacio y <strong>el</strong> tiempo. Después <strong>de</strong> su Resurrección y propiamente<strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la Ascensión <strong>de</strong> Jesús al ci<strong>el</strong>o, vemos la plena manifestaciónd<strong>el</strong> Espíritu Santo. Con la venida d<strong>el</strong> Espíritu Santo se cumplía lo profetizadopor Jo<strong>el</strong>: ‘Suce<strong>de</strong>rá en los últimos días que infundiré mi Espíritu sobretoda carne y profetizarán’ (Act. 2, 16s (= Jl. 3,1). “Por <strong>el</strong> don d<strong>el</strong> Espíritu Santosucedió también, entre otras cosas, esta maravilla: mientras antes, sólopocos (…) podían compren<strong>de</strong>r más allá d<strong>el</strong> sentido literal lo escrito enMoisés y los Profetas, ahora son innumerables los creyentes que, aunque nologren enten<strong>de</strong>r <strong>el</strong> significado espiritual en toda su extensión y plenitud, síestán convencidos (<strong>de</strong> él,…) siendo esta convicción indudablemente inspiradaen todos por la potencia d<strong>el</strong> Espíritu Santo” 325 .* * *Todo lo anterior junto nos dice que <strong>el</strong> Espíritu se <strong>de</strong>fine en r<strong>el</strong>acióncon <strong>el</strong> <strong>Padre</strong> y con <strong>el</strong> Hijo: “para distinguir a las Personas se distinguen losvocablos <strong>de</strong> las r<strong>el</strong>aciones (divinas), por los que se entien<strong>de</strong> como <strong>Padre</strong> aAquél <strong>de</strong> quien todo proviene sin que Él tenga <strong>Padre</strong>; se dice Hijo, en cuantonacido d<strong>el</strong> <strong>Padre</strong>; y se dice Espíritu Santo, por proce<strong>de</strong>r <strong>de</strong> la boca <strong>de</strong>Dios y santificarlo todo” 326 . Esta manera <strong>de</strong> <strong>de</strong>finirse le permite estar siempreen movimiento, por un lado, y a<strong>de</strong>más poseer lo que <strong>el</strong> <strong>Padre</strong> da al HijoPropiedad <strong>de</strong> CENACATMEDITACIONES PARA CATEQUISTAS323 Ireneo <strong>de</strong> Lyon, Demostración <strong>de</strong> la predicación apostólica 7.9.324 Cirilo <strong>de</strong> Jerusalén, Cateq. XVII, 9.325 Orígenes, De princip. II,7, 2.326 Rufino <strong>de</strong> Aquileia, Expositio Symb. 33. Y en <strong>el</strong> mismo número agrega: “Y para <strong>de</strong>mostrar queuna y la misma es la divinidad <strong>de</strong> la Trinidad, como <strong>de</strong>cimos creer en Dios <strong>Padre</strong>, esto esañadiendo la preposición en, así también <strong>de</strong>cimos creer también en Cristo, su Hijo, así comotambién en <strong>el</strong> Espíritu Santo.”89

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!