El Padre Nuestro y el Credo - Centro Nacional de Catequesis
El Padre Nuestro y el Credo - Centro Nacional de Catequesis
El Padre Nuestro y el Credo - Centro Nacional de Catequesis
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
hizo a la Madre; <strong>el</strong> Hacedor <strong>de</strong> todo se hace uno entre todos;es llevado en las manos <strong>de</strong> la Madre <strong>el</strong> Rector d<strong>el</strong> Universo.Mama <strong>el</strong> pecho quien gobierna los astros; calla, quien es <strong>el</strong>Verbo” 213 .Tomar <strong>el</strong> camino <strong>de</strong> la carne significaba <strong>el</strong>egir <strong>el</strong> camino <strong>de</strong> la fragilidad,al colmo <strong>de</strong> necesitar pañales; <strong>de</strong> experimentar la pobreza y todaindigencia propia <strong>de</strong> la fragilidad humana; en fin, saberse débil. Todo lohizo para que nosotros llegáramos a ser adultos: “Él ha sido pequeño, Él hasido niño, para que tú puedas ser varón perfecto; Él ha sido ligado con pañales,para que tú puedas ser <strong>de</strong>sligado <strong>de</strong> los lazos <strong>de</strong> la muerte; Él ha sidopuesto en un pesebre, para que tú puedas ser colocado sobre los altares. Élha sido puesto en tierra, para que tú puedas estar entre estr<strong>el</strong>las; Él no tuvolugar en <strong>el</strong> Mesón para que tú tengas muchas mansiones en <strong>el</strong> ci<strong>el</strong>o (cf. Jn.14,2). Él, siendo rico, se ha hecho pobre por vosotros, a fin <strong>de</strong> que su pobrezaos enriquezca (II Cor. 8,9). Luego mi patrimonio es aqu<strong>el</strong>la pobreza y la<strong>de</strong>bilidad d<strong>el</strong> Señor es mi fortaleza. Prefirió para sí la indigencia, a fin <strong>de</strong> serpródigo para todos. Te purifican los llantos <strong>de</strong> aqu<strong>el</strong>la infancia que da vagidos,aqu<strong>el</strong>las lágrimas han sido mis d<strong>el</strong>itos. Soy pues Señor Jesús más <strong>de</strong>udortuyo por las injurias que has sufrido por redimirme que por las obras quehas realizado al crearme. ¡De nada serviría nacer, si no tuviésemos <strong>el</strong> beneficio<strong>de</strong> la Re<strong>de</strong>nción!” 214 .De este modo, toma la humana naturaleza, sus faculta<strong>de</strong>s, las d<strong>el</strong>cuerpo y las d<strong>el</strong> alma 215 , acepta pasar por la experiencia d<strong>el</strong> hambre, d<strong>el</strong>sueño, d<strong>el</strong> dolor, <strong>de</strong> la ignorancia; acepta poseer una voluntad y una capacidadhumanas para comunicar la vida <strong>de</strong> Dios. En Cristo hecho carne Diosnos amó con un corazón, con sentimientos y con voluntad <strong>de</strong> hombre paraque <strong>el</strong> hombre encuentre en <strong>el</strong> camino humano <strong>el</strong> medio para llegar a serDios:“Sí, la Palabra <strong>de</strong> Dios llegó a ser hombre, a fin <strong>de</strong> que tú,siendo hombre puedas apren<strong>de</strong>r, con arte, cómo <strong>el</strong> hombr<strong>el</strong>lega a ser Dios” 216 .Propiedad <strong>de</strong> CENACATHa sido <strong>el</strong> amor por la humanidad tan característico <strong>de</strong> la naturalezadivina <strong>el</strong> único motivo <strong>de</strong> la presencia <strong>de</strong> Dios en la humanidad 217 . Y así <strong>el</strong>hombre se va introduciendo en los beneficios <strong>de</strong> la vida divina que recibeMEDITACIONES PARA CATEQUISTAS213 Quodvult<strong>de</strong>us, Serm. III <strong>de</strong> Symb. IV. Traducción <strong>de</strong> Santos Sabugal, <strong>El</strong> <strong>Credo</strong>. La fe <strong>de</strong> laIglesia... op. cit., 388.214 Ambrosio <strong>de</strong> Milán, Tratado sobre <strong>el</strong> Evang<strong>el</strong>io <strong>de</strong> san Lucas II, 4215 “Por nuestra salvación aceptó <strong>de</strong>venir hombre y manifestarse a todos, tomando sobre sí cuantopertenece a la naturaleza d<strong>el</strong> hombre para, probado en todas sus faculta<strong>de</strong>s, perfeccionarla consu po<strong>de</strong>r”. Teodoro <strong>de</strong> Mopsuestia, Hom. Cateq. V, 5.216 Clemente <strong>de</strong> Alejandría, Cohartatio ad gentes I PG 8,66.217 “Si pues <strong>el</strong> amor a la humanidad es una marca propia <strong>de</strong> la naturaleza divina, ya tienes la razónque buscabas, ya tienes la causa <strong>de</strong> la presencia <strong>de</strong> Dios entre los hombres”. Gregorio <strong>de</strong> Nisa,La gran catequesis XV, 2.59