DESARROLLO ECONÓMICO SOSTENIBLE, RELACIONES ...
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A pesar de que la hipótesis de la sustituibilidad ha predominado, se han propuesto otras<br />
funciones de producción que reconocen el carácter complementario de los factores y por lo<br />
tanto su uso en proporciones fijas. Tal es el caso del modelo de complementariedad total de<br />
Leontieff, de los años cincuenta. A pesar de que tales propuestas no tuvieron acogida en su<br />
momento, posiblemente porque el agotamiento de las fuentes y los efectos de vertedero no se<br />
consideraban críticos, hacia adelante están llamadas a tener una gran aplicabilidad.<br />
Igualmente vale la pena destacar los aportes de Georgescu Roegen quien ha tratado de<br />
corregir los entuertos que se derivan de la función de producción neoclásica la cual busca<br />
mejorar incluyendo el tiempo como variable explícita y considerando no sólo los productos sino<br />
también los desechos y degradaciones que aparecen inevitablemente ligados a los primeros.<br />
Su expresión funcional por tanto se presta a un enfoque globalizado más propio de la<br />
termodinámica o de la ecología que cierra la puerta en lo económico al supuesto de la perfecta<br />
sustituibilidad de los factores presentes en la función neoclásica típica. Veamos: 291<br />
La función así concebida tiene la forma q t = Φ [a t,b t,....,A tB t,...]<br />
en donde:<br />
qt : es el producto<br />
a,b, .... : los factores y desechos que intervienen en la calidad de flujos<br />
A, B, ... : los que intervienen en calidad de fondos<br />
t : = tiempo<br />
Es por tanto, una función homogénea de primer grado con respecto a todas sus variables,<br />
incluido el tiempo.<br />
3.2.3 Una Nueva Forma de Contabilizar el Ingreso Nacional Neto.<br />
Las cuentas nacionales tal como se realizan en la actualidad en la generalidad de los países<br />
que consideran solamente los bienes y servicios transados en el mercado proporcionan<br />
indicadores imperfectos para conocer las tendencias del bienestar humano, puesto que el<br />
ingreso agregado si bien puede correlacionarse positivamente con el bienestar no es suficiente<br />
para conocer la evolución y características de aspectos claves en el desarrollo como los<br />
recursos humanos y el aprovechamiento educacional en las economías, los daños causados al<br />
medio ambiente, el agotamiento de los recursos naturales y las incidencias culturales, políticas<br />
y sociales de las variaciones del ingreso.<br />
El PIB y el PNB según el caso, son en la actualidad los indicadores más utilizados del progreso<br />
y el desarrollo, creados por Simon Kuznets, premio Nobel de economía en 1971, y criticados<br />
por no hacer distinción entre la cantidad y la calidad del crecimiento económico.<br />
Operativamente en las economías de crecimiento, el desarrollo se ha definido como un<br />
aumento del Producto Nacional Bruto (PNB) sin reconocer que el desarrollo debe referirse al<br />
cambio cualitativo de un sistema económico cuyo sustento, el planeta Tierra, no crece y<br />
además debe guardar un equilibrio dinámico con el ambiente para lo cual es necesario que la<br />
actividad económica establezca una relación no problemática con la naturaleza y por lo tanto<br />
con sus ecosistemas particulares, que constituyen por definición el acervo de capital natural, lo<br />
que significa conservar este acervo en forma independiente del capital hecho por el hombre,<br />
reconociendo sus especificidades. La utilización de los recursos naturales no renovables no<br />
puede considerarse como acumulación de riqueza, así produzca esa ilusión en el corto plazo, y<br />
esto es lo que está sucediendo en las cuentas nacionales: entre más una nación agota sus<br />
recursos naturales, más crece el PNB. Esto viola los principios de la contabilidad elemental<br />
puesto que se está registrando el agotamiento de un capital como un activo corriente.<br />
291 Véase NAREDO, J.M. Cap. XX Las formalizaciones de reino de la producción y el consumo, sus limitaciones y paradigmas, en La economía en<br />
evolución. Siglo XXI, Madrid, 1987.<br />
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