PNUD • Libertad para elegir - Programa de las Naciones Unidas ...

Opciones culturales en los medios y el internetEn términos sociales, la política neoliberal desatendió la educación, descuidó el patrimonio histórico yarqueológico, dejó de apoyar a los creadores, incluyendo a los productores televisivos y cinematográficos.Abrió aún más el ingreso de señales y películas extranjeras al permitir la entrada de capital foráneo enlas telecomunicaciones, los medios audiovisuales y las salas de cine. No aplicó, como Canadá, la regla dela “exclusión cultural” para proteger a su industria de la cultura. Con ello se fortalecieron los grandescapitales y los oligopolios crecieron. En menos de 20 años, el ingreso económico de los grupos másvulnerables había descendido notablemente y 30 años después (2010) la mitad de la población se encuentraen la línea de la pobreza.Las críticas al neoliberalismo y la resistencia de los países dependientes hicieron que la comunidad internacionaltuviera que plantearse nuevas metas. Según afirma Lourdes Arizpe, en 1990, el PNUD creó uníndice de desarrollo distinto al Producto Interno Bruto (PIB), contrario a los indicadores que habían privadodurante muchos años y que fueron reforzados por las políticas neoliberales. Éste, “al contrario delparadigma del Consenso de Washington, se convirtió en el núcleo de la creatividad intelectual y de laevolución de las ideas sobre el desarrollo en gran número de nuevas temáticas: globalización, género,seguridad, cuidado, cultura, cambio climático, tecnología y democracia entre muchos otros. A lo largo delos años este índice se transformó en el criterio internacional más importante a través del cuál los paísesdel mundo medían sus avances. El IDH también aportó las bases para establecer las Metas del Milenio delas Naciones Unidas que hoy constituyen el horizonte más importante para todos los países del mundo,incluyendo a México. Nuestro país, de hecho, se ha rezagado en el avance hacia estas metas, sobretodopor ser uno de los dos países de América Latina en los que ha crecido la pobreza en los últimos años, deacuerdo a cifras de la Cepal.” Nuestro país se encuentra en el sitio 64 de acuerdo con el índice PNUD.En estas condiciones la industria de la cultura y la comunicación se han desarrollado en consonancia conlos indicadores tradicionales pero no de acuerdo con los que plantea el PNUD. Es decir, las tecnologíasse han difundido, la infraestructura ha crecido y la oferta numérica también, según reportan las cifras.En 2003 existía un aparato receptor por cada 3.5 espectadores y había 18.5 millones de telehogares.Entre otros elementos, el equipamiento muestra la gran penetración de las industrias culturales: 97.9% delos entrevistados posee televisión en casa, y de ellos 37.2% responde tener dos o más; 95.8% se beneficiade aparato de radio, y de éstos 25% comenta tener dos o más; 76.5% de los entrevistados expresa poseerlibros en casa y entre 60% y 80% tiene objetos relacionados con la reproducción de música grabada comodiscos compactos (76.5%), casetes (69.7%), grabadoras (68.2%) y reproductor de discos compactos (66.5%)(Conaculta, 2004). De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) (2010), loshogares con computadora son 26.8% y los que tienen acceso a Internet 18.4%.Asimismo el equipamientode las ciudades en materia de cines, bibliotecas, librerías, teatros y salas de conciertos es amplio, aunqueestá mal repartido. Se concentra en las tres ciudades más importantes del país por su movimiento económicoy su densidad poblacional: el Distrito Federal, Monterrey y Guadalajara.177