PNUD • Libertad para elegir - Programa de las Naciones Unidas ...

La Cultura y la Libertad para elegirLa tensión entre igualdad de género y conservación ambiental no es sencilla de resolver, pero tampocose puede ignorar, de este reto surge el potencial crítico del ecofeminismo como una perspectiva que tienemucho que aportar en el pensamiento y práctica de la sustentabilidad. Sin embargo, también es importantereconocer que aún hace falta dotar al ecofeminismo de herramientas teórico-metodológicas quepermitan transversalizar los cambios que se buscan en el modelo de desarrollo. A ello puede contribuirel enfoque del Desarrollo Humano Sustentable (DHS) pues no sólo es afín con gran parte de los planteamientosecofeministas, sino que también ofrece instrumentos operativos para integrar variables comola justicia y la igualdad.Este modelo fue elaborado por Amartya Sen con base en sus estudios sobre el hambre, la elecciónsocial, los derechos y el desarrollo. De acuerdo al autor los aspectos económicos resultan insuficientespara impulsar y medir el grado de avance de las sociedades y la calidad de vida que se puede alcanzar,al respecto señala que: “El desarrollo puede concebirse (...) como un proceso de expansión de las libertadesreales de que disfrutan los individuos. El hecho de que centremos la atención en las libertadeshumanas contrasta con las visiones más estrictas del desarrollo, como su identificación con el crecimientodel producto nacional bruto, con el aumento de las rentas personales, con la industrialización, con losavances tecnológicos o con la modernización social” (Sen, 2000, p. 19).El enfoque del DHS ha sido recuperado por el PNUD que lo concibe como “la posibilidad de disfrutaren igualdad de oportunidades, una vida prolongada, saludable y creativa” (PNUD, 2009, p. 2). Bajo estaperspectiva se considera que la expansión de las libertades debe ser el medio y el fin de las políticasde desarrollo, pues sólo así se impulsará la agencia necesaria para que cada individuo pueda elegir yconstruir estilos de vida que le parezcan deseables.Para operar y medir la ampliación de la libertad se utiliza el concepto de capacidades, entendidas comoel conjunto de condiciones y oportunidades que delimitan lo que las personas pueden ser y hacer; loque se busca así es ampliar la libertad positiva de los individuos a través del acceso a recursos de todaíndole que les permitan concretar sus elecciones. En torno a ellas el PNUD ha construido el Indice deDesarrollo Humano (IDH) y su vertiente relativa al género (IDGH), en los que se miden las siguientescapacidades básicas: tener una vida larga y saludable, educación y nivel de vida digno; el IDGH mide lasdesigualdades socioeconómicas entre mujeres y hombres en relación a los mismos rubros. En torno aesta temática también se utiliza el Indice de Potenciación de Género (IPG) que tiene el objetivo deevaluar el acceso de las mujeres a recursos y espacios de decisión. 77 Cabe mencionar las variables que se utilizan para dar cuenta de dichas capacidades medidas por el IDH y el IDHG: esperanza de vida al nacer, tasade analfabetsismo, tasa de matriculación escolar y PIB per cápita (PNUD, 2005). Por otra parte el IPG mide el número de puestos ocupados pormujeres en parlamentos o congresos nacionales, en cargos gerenciales o directivos y los ingresos salariales en comparación con los varones(PNUD, 2009).55