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La Cultura y la Libertad para elegirSeguridad pública y seguridad humana en el DistritoFederal: Hacia una agenda de política pública– Eduardo Nivón Bolán 1 –¿Cómo tratar los crecientes problemas de inseguridad pública que padecen las grandes ciudadesmexicanas, especialmente la Ciudad de México? ¿Cómo debe evaluarse la estrategia anticrimen que se hapropuesto la reorganización de las fuerzas policiacas y la emisión de nuevas leyes y penas para combatirla inseguridad? Frente a las dos grandes estrategias que sintetizan el debate político actual sobre la inseguridad:desarrollo social o represión de la delincuencia, ¿es posible establecer acuerdos generales quepermitan considerar una especie de salida de la crisis que la inseguridad ha avocado al país? Es evidenteque el actual clima de inseguridad pública es un problema dinámico y multifactorial. Un muy completopanorama de la inseguridad en la zona metropolitana de la Ciudad de México elaborado por Wil Panstersy Héctor Castillo Berthier (2007), nos presenta una imagen amplia y diversa de la inseguridad. Como señalanlos autores desde el mismo título, que la violencia y la inseguridad son fenómenos que no eludenla fragmentación social y la politización de los problemas públicos que caracteriza la vida política mexicanade los últimos años. Es evidente que los problemas de violencia e inseguridad son, como concluyenlos autores, problemas de justicia social y de democracia verdadera, sea en el 2006, cuando concluyensu trabajo, o en el 2010 que muestra indicadores más preocupantes que los de aquel año. Pero si elpunto de partida es la realización de un buen diagnóstico, la solución a los problemas de los ciudadanosconduce al establecimiento de políticas públicas que permitan superar el callejón sin salida que suponeoptar entre la represión al crimen o el desarrollo social.Este texto explora la noción de seguridad humana como un marco de intervención amplio e integralen el diseño de estrategias democráticas y justas para combatir la inseguridad. Se trata de una visióngeneral que quiere evitar reducciones ingenuas y por el contrario proponer un panorama de amplioscompromisos institucionales. Una problemática ineludible es, si una propuesta tan dilatada como la quesupone el modelo de seguridad humana tiene posibilidades de generar resultados inmediatos o de cumplircon la necesidad de establecer políticas claras y evaluables en los diversos momentos de aplicación. Paraavanzar en este sentido haremos una breve revisión de las informaciones disponibles sobre victimizacióny percepción del delito para conectar esta problemática con la propuesta general de seguridad humanaelaborada hace más de quince años por el Programa de las Naciones Unidad para el Desarrollo, PNUD.Al final señalaré algunos problemas que se derivan de este recorrido para una agenda de políticas públicassobre seguridad.1 El autor agradece a Delia Sánchez Bonilla su colaboración en la búsqueda y selección del material estadístico.75