PNUD • Libertad para elegir - Programa de las Naciones Unidas ...

La Cultura y la Libertad para elegir3. Los territorios de la memoria: el patrimonio tangible e intangibleLa Convención Internacional de las Naciones Unidas que ha sido más ratificada por los países –despuésde la del Niño– es la del Patrimonio Cultural y Natural. Hay un consenso casi universal, pues, en el valordel patrimonio tangible y del natural. Este reconocimiento ha llevado a un sinnúmero de programas parasu conservación alrededor del mundo, en los que México ha destacado. En particular, los programas deconservación del patrimonio cultural tangible y del Centro Histórico de la Ciudad de México se citan confrecuencia como ejemplo para otras ciudades, tanto del país como del extranjero. Ello se debe a quedesde hace ya varias décadas se consideró que el patrimonio arquitectónico y urbanístico formabaparte del conglomerado cultural que le da identidad y distinción de la nación. Se impulsó, de hecho, nosólo una narrativa histórica sino también antropológica de la ciudad, plasmada en la diversidad de museosque abordan distintos ámbitos de la vida citadina.La conservación del patrimonio edificado y monumental y la creación de museos y centros culturales,sin embargo, llevan al riesgo de que los centros de las ciudades se conviertan en museos. En cambio, lasdos maneras de promover un movimiento constante son dinamizar las actividades económicas, incluidaslas nuevas construcciones, y promover el patrimonio cultural inmaterial. Es decir, complementar la conservacióncon la creación y reinvención del patrimonio cultural vivo.El “corazón” de la Ciudad de México concentra gran número de arquitectónicas, arqueológicas, y decreaciones artísticas e históricas y arquitectónicas que representan la identidad de México e influyenen forma decisiva en el futuro de sus ciudades y de su sociedad. El centro es el lugar en el que se definela identidad mayor. De hecho, se ha abordado la sociabilidad como parte de la perspectiva con la quese han llevado a cabo tanto programas de rescate y conservación, como de renovación y revitalizacióndel centro y de las delegaciones de la ciudad.En México, el dinamismo cultural del país ha seguido viento en popa en el mundo del arte y de losnuevos medios. Los jóvenes artistas han seguido con una creación profusa de nuevas formas de ambientar,instalar, –incluso adosar ciudades perdidas a los museos–, hacer performance, explorar la biosimbosiscon el entorno natural, y cuanto les ha dictado la invención. En la Ciudad de México, además,las festividades y proyectos culturales se religiosidad-crean sin cesar, como si siguiéramos cumpliendo aldía todavía el calendario ritual tenochca y tlalteloca.21