30.04.2016 Views

PRESENTACIÓN 1

Incursiones_queer_FINAL

Incursiones_queer_FINAL

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

360 INCURSIONES QUEER EN LA ESFERA PÚBLICA<br />

La respuesta, por supuesto, era no. La cuestión, en efecto, era retórica.<br />

Presuntamente, los legisladores dieron por sentadas las relaciones<br />

de poder constituidas por el estigma sexual y su reproducción<br />

en el Congreso de la Unión en este momento fundacional para la<br />

vida política de la nación; el campo legislativo, después de todo,<br />

era un terreno generizado —si bien regulado de modo informal,<br />

implícito— y, más allá de la exclusión de mujeres, los legisladores<br />

entendían que los hombres deben ser hombres tanto en el Congreso<br />

como en la vida cotidiana.<br />

Las declaraciones de Cravioto arrojan luz sobre varios temas<br />

explorados en este trabajo, con implicaciones no solo para México<br />

y Brasil, sino de manera más amplia. Su discurso indica dos niveles<br />

relacionados pero distintos de exclusión de la representación: representación<br />

en la política formal (un legislador no puede ser un pederasta)<br />

y representación en el plano del lenguaje o la significación<br />

(ni la palabra puede ser pronunciada). Es notable que el asunto de<br />

mayor alcance en el debate girara en torno a la capacidad de las<br />

instituciones democráticas formales para subordinar los intereses<br />

particulares (y los vicios inconfesables) de los funcionarios públicos.<br />

Así, al celebrar una lucha global “casi triunfante” contra los<br />

privilegios particulares de la iglesia y el Estado, declaró Cravioto,<br />

“pasaron, por fortuna, los tiempos en que Luis xiv podía decir: ‘El<br />

Estado soy yo’ ”. En otras palabras, al estipular que una excepción<br />

generizada no debía pronunciar su nombre, Cravioto buscaba salvaguardar<br />

la universalidad tanto de las instituciones democráticas,<br />

supuestamente racionalizadas, como de la nación.<br />

Paradójicamente, sin embargo, sus palabras contenían las semillas<br />

de su propia destrucción y apuntaban a formas de resistencia<br />

que se movían de abajo hacia arriba y de afuera hacia adentro. Ya la<br />

subcultura homoerótica cada vez más visible en el país —los bailes<br />

públicos que, “por desgracia, está habiendo entre nosotros”— trazó<br />

una ruta hacia el discurso público del campo legislativo, aunque<br />

solo fuera para decir que no debía decirse. En otras palabras, la<br />

afirmación de Cravioto que daba por sentada la obligatoriedad de<br />

los papeles de género solo era necesaria, de hecho solo posible,<br />

debido a su erosión a través de formas cotidianas de resistencia en<br />

la plaza pública posrevolucionaria. Como he argumentado, estas

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!