10.05.2013 Views

La adaptación familiar en adopción internacional: - Share ...

La adaptación familiar en adopción internacional: - Share ...

La adaptación familiar en adopción internacional: - Share ...

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

LA ADAPTACIÓN FAMILIAR EN ADOPCIÓN INTERNACIONAL<br />

n<strong>en</strong> necesidades especiales (Hoopes, 1982). También se ha destacado que <strong>en</strong> familias<br />

mixtas se da una mayor t<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia a la ruptura (Berástegui, 2003b; Berry y<br />

Barth, 1990; Hoksberg<strong>en</strong> y cols., 1988, 1997, 1998; Kadushin y Seidl, 1971; Marcovitch<br />

y cols., 1997).<br />

Algunos autores han justificado esta relación por la mayor t<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia de los servicios<br />

sociales a asignar niños mayores o niños con mayores dificultades a las familias<br />

que ya ti<strong>en</strong><strong>en</strong> hijos biológicos (Hoksberg<strong>en</strong> y cols., 1997b, 1998). Berástegui<br />

(2003b), sin embargo, manti<strong>en</strong>e que la pres<strong>en</strong>cia de hijos biológicos es un factor de<br />

riesgo indep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>te a la edad de <strong>adopción</strong> del m<strong>en</strong>or.<br />

Otras explicaciones que se han aportado por la literatura al riesgo asociado a las<br />

familias mixtas es la posibilidad de que las madres que ya han t<strong>en</strong>ido hijos biológicos<br />

quieran repetir las experi<strong>en</strong>cias y los modelos <strong>en</strong>sayados con éxito con sus anteriores<br />

hijos y sean rígidas tanto <strong>en</strong> sus expectativas como <strong>en</strong> sus patrones educativos,<br />

sin t<strong>en</strong>er <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta las posibles especificidades del m<strong>en</strong>or (Rosemboom, 1994).<br />

También es posible que, <strong>en</strong> un int<strong>en</strong>to por proteger al adoptado los padres puedan<br />

int<strong>en</strong>tar ofrecerle más at<strong>en</strong>ción, lo que puede ser vivido por sus hijos biológicos con<br />

recelo y por los adoptados con s<strong>en</strong>sación de inferioridad (Ternay y cols., 1985) o que,<br />

por el contrario, fr<strong>en</strong>te a los normales conflictos <strong>en</strong>tre hermanos, los padres vivan un<br />

cierto conflicto de lealtades y ti<strong>en</strong>dan a proteger a sus hijos biológicos y a s<strong>en</strong>tirse<br />

culpables por haberles impuesto la <strong>adopción</strong>. Por último, el mayor riesgo asociado<br />

a la <strong>adopción</strong> <strong>en</strong> familias con hijos biológicos podría deberse al aum<strong>en</strong>to de personas<br />

que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> que adaptarse a la nueva situación y a la multiplicación de las fu<strong>en</strong>tes<br />

de estrés y conflicto, aunque esta hipótesis predeciría también un mayor riesgo<br />

de las familias que adoptan por segunda o tercera vez, predicción que <strong>en</strong>tra <strong>en</strong> contradicción<br />

con los resultados de las investigaciones (Berástegui, 2003b)<br />

En este s<strong>en</strong>tido, la pres<strong>en</strong>cia de hijos adoptivos previos <strong>en</strong> la familia parece<br />

t<strong>en</strong>er un papel prev<strong>en</strong>tivo (Berry y Barth, 1990, McDonald y cols., 2001, Partridge<br />

y cols., 1986) o neutro (Berástegui, 2003b; Boyne y cols., 1984; Festinger, 1986) fr<strong>en</strong>te<br />

a la <strong>adaptación</strong> del nuevo niño.<br />

En cuanto al número de hijos, algunos autores <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran una mayor <strong>adaptación</strong><br />

<strong>familiar</strong> y del m<strong>en</strong>or <strong>en</strong>tre las familias más grandes (Erich y Leung, 1998;<br />

Hoksberg<strong>en</strong> y cols., 1998), por el contrario, Ros<strong>en</strong>thal y cols. (1988) predic<strong>en</strong> una<br />

mejor <strong>adaptación</strong> <strong>en</strong> las familias más pequeñas aunque la relación que <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tra<br />

no es muy relevante y Berry y Barth (1990) no <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran difer<strong>en</strong>cias significativas<br />

<strong>en</strong> función del número de m<strong>en</strong>ores <strong>en</strong> el hogar.<br />

En cuanto al puesto del adoptado <strong>en</strong> la fratría parece que no ser el hermano<br />

pequeño (sino el mayor o mediano) al inicio de la conviv<strong>en</strong>cia <strong>familiar</strong> es un factor<br />

de riesgo para el adoptado (Festinger, 1986; Hoksberg<strong>en</strong>, 1997b).<br />

Int<strong>en</strong>tando evaluar todos estos factores <strong>en</strong> su conjunto, Brodzinsky y Brodzinsky<br />

(1992) analizan la influ<strong>en</strong>cia de la composición del hogar <strong>en</strong> la <strong>adaptación</strong><br />

de los m<strong>en</strong>ores adoptados y llegan a la conclusión de que los niños sin hermanos<br />

131

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!