La adaptación familiar en adopción internacional: - Share ...

güenza o la distancia de los adoptados frente a las personas de su misma raza
(Tizard, 1991) o verbalizaciones del tipo “preferiría ser blanco” o “no me gusta pasar
tiempo con personas de mi misma raza” (Rushton y Minnis, 1997).
Algunas investigaciones encuentran, por el contrario, que los menores adoptados
inter-racialmente tienen mayor conciencia de su raza y muestran mayor preferencia
hacia ella que los adoptados intra-raciales a edades tempranas pero detectan
diferencias en los patrones desarrollo de la identidad racial concluyendo que
estas diferencias pueden ser los precursores de problemas de adaptación y de identidad
(Jonson, Shireman y Watson, 1987; Shireman y Johnson, 1986).
McRoy, Zurcher, Lauderlane y Anderson (1982) también encuentran una mejor
identidad racial en los adoptados inter-raciales que en los intra-raciales y relacionan
esta identidad positiva con la aceptación por parte de los padres de la identidad
racial de sus hijos y con el carácter multi-étnico de la escuela y del barrio en
el que se inserta el menor. Andujo (1988), por otro lado, apunta a que las diferencias
en identidad racial y preparación para afrontar el racismo dependen más del
estatus socio-económico de la familia que de la raza de los padres.
Grotevant y McRoy (1997) aportan que en su estudio el 70% de las mujeres y
el 95% de los varones se sentían cómodos o muy cómodos con su procedencia étnica
y sólo un 5-8% respectivamente se sentían algo o muy incómodos, mientras que
el resto afirmaba no sentirse ni cómodo ni incómodo. Como era previsible, se encontraron
diferencias significativas en este punto con sus hermanos no adoptados en
los que no aparece nunca la incomodidad frente a la procedencia étnica.
Berástegui (2003a) observa cómo estas investigaciones no aciertan a encontrar
grandes diferencias en la identidad racial de los menores en función de la composición
racial de la familia y, ninguna de las estudiadas, logra encontrar un nexo de
unión, más allá de la ideología, entre la identidad racial positiva y la autoestima,
la adaptación psicológica y familiar y el bienestar del menor, en último término.
Parece que el movimiento contra la adopción inter-racial hunde más sus raíces
en el enfado y el dolor que las comunidades minoritarias experimentan por causa
del racismo estructural que han padecido –y que genera una suerte de racismo “de
vuelta” frente a la comunidad tradicionalmente dominante-, que en la comprobación
de un peligro real para los niños, cuyo interés debería sobreponerse a todo
otro principio (Adroher y Berástegui, 2000; Berástegui 2003a; O´Brian, 1994). Aún
así, un cierto número de adoptados y un cierto número de familias encontrarán
problemas relacionados con este punto por lo que no puede ser una cuestión olvidada
en la investigación europea.
2.3.4. PROBLEMAS DE INTEGRACIÓN SOCIAL
LA ADAPTACIÓN FAMILIAR EN ADOPCIÓN INTERNACIONAL
La mayoría de la investigación sobre la adaptación se ha centrado en niños y
adolescentes pero se sabe muy poco sobre la adaptación del adoptado a la vida
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