La adaptación familiar en adopción internacional: - Share ...

RESULTADOS
En el caso de que se prevea que la relación entre la variable independiente y
la dependiente puede no ser lineal se categorizarán las puntuaciones de la independiente
en altas (25% superior), medias (50% intermedio) y bajas (25% superior)
para tratarla como variable ordinal y hacer contrastes de diferencias inter e intragrupos.
6.7.1. LA CONDUCTA DEL MENOR AL LLEGAR
INFORMADOR
Encontramos diferencias significativas en los problemas de ansiedad al llegar
referidos por los padres en función del informador (χ 2 =7,281; g.l.=2; p=0,026) de
manera que las madres que han contestado a los cuestionarios relatan más problemas
de ansiedad (X =5,62) que los padres que lo han hecho (X =3,63; U=1917,5;
p=0,009).
También encontramos diferencias significativas en el total de problemas internalizantes
del menor al llegar informando de nuevo de más problemas internalizantes
las madres (X =8,68) que los padres (X =6,73; U=2045,5, p=0,033).
SEXO DEL MENOR
Encontramos que las familias que adoptaron niños refieren más problemas de
conducta de todos los tipos (exceptuando las quejas somáticas) que las que adoptaron
niñas (Gráfico 14).
Esta mayor problemática de conducta en los varones sólo es significativa en las
conductas agresivas, los problemas de atención, el síndrome externalizante y el total
de conductas problema tal y como podemos observar en la Tabla 69.
EDAD DEL MENOR
En cuanto a la relación entre la edad del menor en el momento de la adopción
y los problemas de conducta inicial que relatan sus padres, encontramos una correlación
positiva y significativa, aunque no muy alta, entre la edad de la adopción y
las quejas somáticas (rho=0,207; p=0,010), los problemas de aislamiento (rho=0,191;
p=0,017), los problemas de ansiedad (rho=0,188; p=0,019) y el total de conductas
internalizantes (rho=0,196; p=0,014) de manera que a mayor edad del menor, mayores
problemas de este tipo parecen manifestarse a su llegada a la familia como
podemos ver en la Tabla 70.
Para comprobar si se da algún tipo de relación no lineal entre la edad del menor
a su llegada a la familia y los problemas de conducta inicial que recuerdan sus
padres se agrupó la edad en intervalos de tres años. El contraste H de Kruskal
Wallis muestra diferencias significativas sólo en los problemas de aislamiento
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