ACTAS

26 Convergencias mediáticas y nueva narrativa latinoamericana
un estudio y recopilación sobre la crónica latinoamericana del siglo XXI. Ahí realiza diferenciaciones por época
entre la producción narrativa que se ha hecho en Latinoamérica. Empieza por situar a los cronistas de indias
como los primeros que hacen narrativa de no ficción. Posteriormente sitúa a las crónicas de los modernistas,
y desde su punto de vista, después del auge modernista, la crónica permanece casi a escondidas durante una
época en que la noticia escueta y la prisa informativa se convierten en dogma excluyente del periodismo. […]
Hasta decenios después cuando, la crónica […] renace a través de libros y de la publicación fragmentada en
varias entregas en periódicos y revistas (Jaramillo, 2012). Dentro de este ‘renacimiento’, sitúa a los autores
que ahora son clásicos para el periodismo narrativo, tales como García Márquez, Tomas Eloy Martínez, Elena
Poniatowska, Carlos Monsiváis, entre otros.
En Latinoamérica en los últimos años se ha creado una ingente producción periodística- literaria (Angulo,
2013). En cuanto a revistas que apuestan por el periodismo narrativo podemos encontrar Gatopardo y Replicante
(México), EtiquetaNegra y Poder (Perú), El malpensante (Colombia), Clarín y RollingStone (Argentina).
Así como libros que hacen recopilaciones sobre la crónica latinoamericana contemporánea como Antología
de crónica latinoamericana actual, dirigida por Darío Jaramillo; o Mejor que ficción. Crónicas ejemplares, coordinada
por Jorge Carrión.
En México el mayor exponente de la creación de periodismo narrativo es Gatopardo. Aunque es una revista
que se fundó en Colombia, en 2006, cambió su domicilio a la Ciudad de México. La idea original de la publicación,
fue que Gatopardo se consolidara como una revista latinoamericana de crónicas y reportajes bajo la
convicción de que hay cronistas en el continente con grandes capacidades y lectores interesados en los temas
de toda la región acerca del periodismo narrativo. En esta revista han colaborado con Ernesto Sabato, Tomás
Eloy Martínez, Antonio Tabucchi, Juan Villoro, Carlos Fuentes, Martín Caparrós, Alma Guillermoprieto, entre
otros muchos cronistas latinoamericanos
Otra revista que también ha apostado por producir periodismo narrativo en México, es Letras libres. La revista
fue fundada en 1999, como continuación de la revista Vuelta de Octavio Paz, de la que asume una importante
herencia intelectual y con la que comparte varios colaboradores e intereses. La sección Letrillas es la que se
dedica a presentar textos de miscelánea; el ensayo breve, la crónica y la reflexión, es decir la parte en donde
se exhiben trabajos de periodismo narrativo.
1.3 Encuestas
A partir de dos textos periodísticos realizados en 2009, que hablan sobre el proceso legal que hubo sobre el
caso Acteal 1 se realizaron veinte encuestas. El primer texto, está dentro de la edición de la revista Gatopardo
que, como lo vimos, forma parte de ese sector especializado en hacer periodismo narrativo en México. Este
texto fue escrito por Marcela Turati, una periodista que aboga por los derechos humanos y frecuentemente
recurre al periodismo narrativo.
Desde el principio del texto el uso de figuras literarias y de un uso de discurso narrativo es visible, pues empieza
así:
“El abogado de los asesinos se recargó contra una pared de la cárcel y encendió un cigarro. No quería quebrarse
ante sus clientes. De por sí lloraban desde que les anunció que, por fin, después de casi diez años de juicio el juez los
condenó a 26 años de prisión”.
El segundo texto, por el contrario, hace un recorrido de lo ocurrido durante el caso Acteal a través de fechas
y datos oficiales, comienza así:
1 La Matanza de Acteal fue una incursión paramilitar en la localidad de Acteal, en el municipio de Chenalhó, ubicado en la región de Los Altos de Chiapas
al sureste de México, el 22 de diciembre de 1997. Durante dicha incursión, fueron atacados indígenas tzotziles de la organización “Las Abejas”, que
se encontraban orando en el interior de una pequeña iglesia de la localidad. El resultado fueron 45 muertos, incluidos niños y mujeres embarazadas.
Mientras el gobierno mexicano califica la masacre como un conflicto étnico entre comunidades, opositores y grupos defensores de derechos humanos
por otra parte la consideran como parte de una estrategia del gobierno para desarticular la base social de la localidad de Acteal.