16.05.2023 Views

El-sexto-sentido-Ordinales-4-Phavy-Prieto

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

—¿Y? —preguntó Emily incitándola a hablar.

—Esto es un poco vergonzoso para mi decirlo en voz alta, Emily —admitió

algo sonrojada.

—¿Te pegó? —preguntó con suavidad.

—¡En absoluto! —contestó rápidamente—. Más bien hizo todo lo

contrario…

—Creo que no comprendo nada en absoluto —determinó Emily

completamente confusa.

—Vi a la señora Edna castigar a una de las pequeñas con una vara de madera,

así que a pesar de las consecuencias se lo prohibí y me las llevé. Por eso

discutí con el duque, le recriminé que me negaría a darle un heredero si ello

implicaba que se le castigara del mismo modo que a sus hijas. A mi jamás me

han castigado de ese modo y no concibo como se puede maltratar a una pobre

criatura tan pequeña cuando su crimen está más que justificado. Se enfureció

de tal manera que lo único que se me ocurrió para calmarle fue besarle y él…

¡Oh dios Emily! —gritó ahora emocionada—. ¡Besa tan bien! Había algo en

él diferente, no parecía frío como otras veces, sino todo lo contrario.

—Y disfrutaste de vuestro encuentro —afirmó Emily sonriente.

—No puedo negar que si, disfruté hasta el punto de desear volver a repetirlo,

sobre todo porque tuve la sensación de que me faltó algo… ¿Se considera eso

pecado?

—Si se considera pecado, creo que hace tiempo que estoy condenada al

infierno —contestó rompiendo a reír y Susan hizo lo mismo—. Cuánto me

alegro de que haya ocurrido esto, facilitará muchísimo las cosas para que tu

matrimonio funcione realmente. Creo que de algún modo, has conseguido

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!