26.01.2019 Views

EL COLLAR DE LA REINA

El collar de la Reina, libro segundo sobre la revolución francesa de Alejandro Dumas. - 1848

El collar de la Reina, libro segundo sobre la revolución francesa de Alejandro Dumas. - 1848

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Mientras se acomodaban en los sillones ofrecidos por Beausire, éste continuaba<br />

estudiándolos y acechaba la mirada del embajador, para dirigir convenientemente la<br />

conversación.<br />

El portugués conservaba su postura digna y oficial.<br />

Boehmer, el hombre de las iniciativas, tomó la palabra en esta difícil circunstancia,<br />

explicando que razones políticas de alta importancia le impedían proseguir la<br />

negociación comenzada.<br />

El embajador emitió un gruñido de protesta y el primer secretario roncó un «¡uf!» que<br />

coreó Su Excelencia.<br />

Boehmer estaba cada vez más confuso, pero no cedió, ni cuando el embajador,<br />

traducido por Beausire, le recordó que la venta se había convenido y que el dinero del<br />

anticipo estaba a su disposición. Y agregó que su Gobierno debía tener conocimiento de<br />

la conclusión de la venta y que romperla era exponer a Su Majestad portuguesa a una<br />

afrenta.<br />

Boehmer arguyó que había pensado en las consecuencias, pero que volver al acuerdo<br />

inicial era imposible.<br />

Beausire no transigía con la ruptura, y advirtió a Boehmer con un lenguaje inequívoco<br />

que romper el convenio era de mal negociante y de hombre sin palabra.<br />

Bossange tomó entonces la palabra para defender la seriedad, nunca en entredicho, de la<br />

casa Boehmer y Bossange. Pero no fue elocuente.<br />

Beausire le cerró la boca con una sola pregunta.<br />

—¿Vos habéis encontrado un mejor postor?<br />

Los joyeros, que no estaban muy fuertes en política y que tenían de la diplomacia en<br />

general y de los diplomáticos portugueses en particular una idea excesivamente alta,<br />

enrojecieron, creyéndose adivinados.<br />

Beausire vio que había dado en el clavo, y como le importaba terminar un asunto que<br />

significaba una fortuna, fingió consultar en portugués al embajador.<br />

—Señores —dijo entonces a los joyeros—, os ofrecen un beneficio, y nada más natural;<br />

esto prueba que los diamantes tienen un precio muy elevado. Pues bien, Su Majestad<br />

portuguesa no quiere hacer sino una buena compra que beneficie a los comerciantes<br />

honrados. ¿Hay que ofrecer cincuenta mil libras?<br />

Boehmer hizo un gesto negativo.<br />

—¿Cien mil, ciento cincuenta mil libras? —continuó Beausire, decidido a ofrecer un<br />

millón con tal de ganar la parte que le correspondía de seiscientas mil libras.<br />

Los joyeros se quedaron durante un momento abrumados, después de haberse<br />

consultado entre sí.<br />

—No, señor secretario. No os toméis el trabajo de tentarnos; la venta se ha efectuado.<br />

Una voluntad más poderosa que la nuestra nos ha ordenado vender el collar en el país.<br />

Sin duda comprenderéis de qué se trata. Excusadnos; no es que nosotros rehusemos, no<br />

hubiéramos hecho semejante cosa; es de alguien más grande que nosotros, más grande<br />

que vos, de quien nace la oposición.<br />

Beausire y el portugués no supieron qué contestar. Hicieron un ademán de cumplido a<br />

los joyeros y trataron de mostrarse indiferentes, sin darse cuenta de que en la<br />

antecámara el comendador ayuda de cámara escuchaba detrás de una puerta, para saber<br />

cómo iba el negocio del cual se le quería excluir. Pero el digno asociado fue tan torpe<br />

que al inclinarse sobre la puerta resbaló y cayó, haciendo un ruido que alarmó a<br />

Beausire, quien corrió a la antecámara y encontró al desgraciado tratando de levantarse.<br />

—¿Qué haces aquí, desdichado? —gritó Beausire.<br />

—Monsieur —respondió el comendador—, traía el correo de esta mañana.<br />

—Dádmelo todo y salid de aquí.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!