11.07.2015 Views

163Ribi

163Ribi

163Ribi

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

obfervatur, inquam, trabem quamvis fortiffimamdeorfum inflecti, ur quae aerem fubjectum habeat,neque hanc flexionem ex nimio pondere, quod perfaepeexiguum eft, fed expremente Gypfo, ottumducere. Calcis porro id propium eft, ut humido fempergaudeat; & nunquam veterafeat, unde Muriprope folum, & in ipfis aedium fundamentis ferreipene funt, Gypfum vero prope terram marcefcit, &fponte concidit, in fummo loco vero, licet imbribusperfufum, ut in caminis, Calci foliditati non cedit.Ut autem ad rem redeam, mirum non eft, figypfeae particulae per trachaeam in fpiritus receptaculaexceptae, ibique cum ferofo lattice e glandulisexfudante commixtae, tam perniciales affectuspariant, vi fua expansiva fiftulares ductus comprimendo,& aeri curfum, & recurfum prohibendo.Ad corrigendas vero noxas e Gypfo contractas,( quamvis ubi admiffum fuerit, non tam facile curationemfufcipiat ) varia ab antiques praefcribebanturremedia. Galenus fecundo de Antidotis Lixiviume cineribus farmentorum vitis commendat,quod idem confirmat Guainerius, qui cinerem ipfumpondere tertii exhibet, Sennertus laudat ftercusmuris, Ego Oleum amygdal, dulc.recens ex tractum,ac emulfiones ex feminibus melonum cumaliquot levamine id genus Artificibus exhibui, fedin hoc opera perfeverantes, omnes Afthmaticos, &Cachecticos, ut plurimum occumbere obfervavi.Cadaver aliquod ex hifce Artificibus, aliifque Opificibuslibenter diffecuifcem, fed nec prece, necpretio a noftrati plebe impetrare licet, ut infpectioulla fiat in denatis ex aliquot non vulgari morbo;imo fi quis id repofcat in publicum bonum, incandefcuntin Medicum, quod morbi caufam quam ignorarit,curiose poftmodum perfcrutari, velit.Non ita vero noxia eft Calx iis, qui eam traftant,veluti Gypfum Calx recens e fornacibus educta igneamvim rejectat, ac urit, miratur propterea PaulusZachia, quomodo in quibufdam Civitatibus permittanturFornaces, in quibus Calx xcoquatur, ob eyaporationem,quam emittunt, pectori infeftam. Nihileft autem, quod, poftquam arferit, ignis femina diutiusretineat, quam lapis calcarius ; Siquidem Calxad annum in loco ficco affervata, cum aqua diluitur,fumigat, &latentemvim ignis prodit, dum aquamfacit effervefcere; progreffu tamen temporis, dumin pulverem fatifcit, ac veterafcit, multum ignis devi illi decedit; minusLa cal y el yeso andan parejos en cuanto a su poderde fraguado; en efecto, tanto el uno como la otra,atemperados y disueltos en agua, unen y pegan;pero el yeso esconde una gran elasticidad, al mismotiempo que es capaz de levantar grandes moles y yohe observado que ejerce su presión no sólo haciaarriba, sino también hacia abajo y en todas direcciones,manifestando su poder de una manera mássensible cuando encuentra menos resistencia. Seobserva, en efecto, que, si se construye un muro deladrillo y yeso sobre un travesaño y se une a otrosuperpuesto anteriormente, se observa, repito, queel travesaño inferior se curva, por muy recio quesea, con tal de que tenga aire por debajo, y estaflexión se debe no al excesivo peso, que muchasveces es mínimo, sino a la presión ejercida por elyeso.Finalmente, la cal tiene la propiedad de llevarsebien con la humedad y no envejece nunca, por loque las paredes de cal, junto al suelo e incluso enlos cimientos de las casas, se. vuelven como de hierro;por su parte, el yeso, junto al suelo, se pudre yse desmenuza espontáneamente, mientras que enlugares elevados, por más que lo azoten las lluvias,y como en los hornos, no le cede a la cal en solidez.Volviendo a nuestro tema, no es extraño que laspartículas de yeso, recibidas a:través de la tráqueaen los receptáculos del aire respirado y mezcladasallí, al humor seroso que se desprende de las glándulas,produzcan tan perniciosos efectos, comprimiendosu fuerza expansiva los conductos fistularesy obstaculizando la entrada y salida del aire. Ahorabien, para curar los daños producidos por el yeso(aunque, cuando ha pasado al interior del organismo,la curación no resulta. fácil), los antiguos recetabandistintos remedios: Galeno, en el libro segundode su obra De los antídotos, recomienda una decocciónde cenizas de sarmiento, remedio confirmadotambién por Guainerio quien propone la cenizamisma, rebajándola a un tercio de peso, y Sennertalaba el excrementa de ratón. Yo a tales trabajadoresles he recetado aceite de almendras dulcesrecién extraído, así como emulsiones de semillas demelón, junto con algún suavizante, pero he comprobadoque los que perseveran en esta profesióntodos ellos se tornan asmáticos y caquécticos, sucumbiendola mayor parte. Me hubiera gustadohacer la autopsia a alguno de estos operarios y aotros artesanos, pero ni con súplicas ni con dinerose puede conseguir de la gente de nuestra57

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!