Sri Ramana Paravidyopanishad - Advaita Vedanta
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– Ensinamentos do <strong>Advaita</strong> <strong>Vedanta</strong>, <strong>Ramana</strong> Maharshi, Papaji, Nisargadatta Maharaj e Mooji –<br />
18<br />
<strong>Sri</strong> <strong>Ramana</strong> <strong>Paravidyopanishad</strong><br />
33 Aquellos que son sumergidos por este sueño profundo de la ignorancia son los<br />
veedores de este mal sueño, el mundo. Y mientras que esta ignorancia no cesa<br />
por la correcta consciencia del Sí mismo real, las almas tienen que vagar errantes<br />
en este laberinto de los tres estados.<br />
La única forma de escapar de este mal sueño es devenir plenamente consciente<br />
del Sí mismo real. Él puede ser llamado, por el momento, «el morador en el supremo<br />
estado».<br />
Así pues, ocurre que todas las criaturas —tanto los hombres como las supuestas<br />
criaturas inferiores— están realmente dormidas todo el tiempo, alternativamente<br />
soñando y durmiendo sin sueños. El sueño profundo sin sueños es solo como un oasis<br />
en una ruta desierta.<br />
34 Así pues, cada criatura está dormida: nadie en este mundo de almas está<br />
despierto. Solo el sabio, que, estando firmemente establecido en el cuarto estado,<br />
habiendo trascendido los tres estados, y que es libre de la ignorancia, está<br />
despierto.<br />
Estar despierto aquí significa ser consciente del Sí mismo real como realmente<br />
es. Debido a este despertar, él [el sabio] ya no es perturbado más por el sueño llamado<br />
el mundo.<br />
Esta singularidad del sabio es explicada en los dos versos siguientes.<br />
35 El sabio está completamente despierto, habiendo devenido establecido en el<br />
verdadero estado del Sí mismo, que es libre de la oscuridad de la ignorancia.<br />
Respecto al sueño del mundo que está siendo visto por aquellos adormecidos en<br />
la ignorancia del Sí mismo, él está dormido.<br />
36 Por consiguiente, se dice que este mundo es como noche para el sabio, mientras<br />
que para el ignorante es como noche el Sí mismo real. Por esta razón el estado