Sri Ramana Paravidyopanishad - Advaita Vedanta
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– Ensinamentos do <strong>Advaita</strong> <strong>Vedanta</strong>, <strong>Ramana</strong> Maharshi, Papaji, Nisargadatta Maharaj e Mooji –<br />
77<br />
<strong>Sri</strong> <strong>Ramana</strong> <strong>Paravidyopanishad</strong><br />
258 La auto-entrega es hecha verdaderamente por el que siempre tiene el<br />
sentimiento, «Que todas las cosas acontezcan acordemente a tu voluntad. En<br />
todos los aspectos, yo soy tu esclavo».<br />
Es decir, después de la auto-entrega, él debe resignarse a la voluntad divina, sin<br />
ninguna reserva.<br />
259 El que se ha entregado está en paz, recordando que Él [Dios] es el portador de la<br />
carga del mundo. El que lleva la carga él mismo es ridículo, lo mismo que la<br />
figura bajo la torre del templo que parece cargar la torre sobre sus hombros.<br />
260 Lo mismo que uno que viaja en un carruaje deposita su equipaje en el carruaje y<br />
completa su viaje, así también debe él ceder su propia carga [samsárica] a Dios y<br />
completar su vida en el mundo.<br />
A continuación se trata de aquellos que se arrogan la tarea de reformar el<br />
mundo o aliviar el sufrimiento de otros.<br />
261 El sabio debe ceder a Dios sus preocupaciones concernientes al bien del mundo,<br />
lo mismo que cede a Él sus preocupaciones por su propio cuerpo y familia.<br />
262 El devoto maduro debe pasar su tiempo, tolerando pacientemente lo que quiera<br />
que le acontece, ya sea agradable, desagradable o de otro modo, sin entregarse al<br />
sufrimiento o al goce, con su corazón absorbido en Él.<br />
263 Cuando el ego muere, habiendo sido tragado por la gracia divina, la auto-entrega<br />
del devoto deviene verdadera y completa.<br />
Esto ha sido dicho en el lenguaje del intelecto. Pero la verdad real de esta<br />
consumación trasciende el intelecto, y, por consiguiente, no es fácil de transmitir en