Sri Ramana Paravidyopanishad - Advaita Vedanta
Sri Ramana Paravidyopanishad - Advaita Vedanta
Sri Ramana Paravidyopanishad - Advaita Vedanta
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
siguientes.<br />
Leia este e outros textos em www.advaita.com.br<br />
– Ensinamentos do <strong>Advaita</strong> <strong>Vedanta</strong>, <strong>Ramana</strong> Maharshi, Papaji, Nisargadatta Maharaj e Mooji –<br />
8<br />
<strong>Sri</strong> <strong>Ramana</strong> <strong>Paravidyopanishad</strong><br />
La enseñanza se da de una manera ligeramente más detallada en los versos<br />
7 En el Corazón mora la realidad que es pura consciencia, el Sí mismo real. Estar<br />
en el Corazón, con la mente quiescente, es conocimiento [consciencia] de Él, y<br />
también el estado de liberación.<br />
El estado de liberación es solo el estado libre de mente en el que el Sí mismo<br />
real, el morador en el Corazón, es realizado como tal.<br />
El Sí mismo real no es el sumiso y pequeño sí mismo aparente, llamado el<br />
«alma». ¿Qué es entonces? La respuesta sigue.<br />
8 Esa pura consciencia, que es el Sí mismo real brillando en el Corazón, siempre<br />
el mismo [sin cambio], y el substrato básico —llamado el Brahman— de todo el<br />
universo, ambos son uno y el mismo.<br />
Ése es el significado que tiene la intención de ser transmitido por los textos<br />
sagrados de las Upanishads, los cuales dicen que el Ser Supremo mismo entró en el<br />
cuerpo como el alma, al tiempo que dan también una narración popular de lo que se<br />
conoce como «creación». Realmente no hay ninguna creación, excepto esa que será<br />
explicada ahora.<br />
9 La apariencia del mundo es ignorantemente sobreimpuesta por la mente sobre<br />
ese substrato, que es la verdad del Sí mismo. Ella [la apariencia del mundo]<br />
oculta esa realidad y brilla [como si fuera] real mientras persiste la ignorancia.<br />
Ignorancia y mente son inseparables; solo hay ignorancia donde hay mente;<br />
donde no hay mente, no hay ignorancia, puesto que en el estado libre de mente el Sí<br />
mismo real no está ocultado. Esto explica por qué el Sí mismo real no es conocido por<br />
los hombres en general.