Sri Ramana Paravidyopanishad - Advaita Vedanta
Sri Ramana Paravidyopanishad - Advaita Vedanta
Sri Ramana Paravidyopanishad - Advaita Vedanta
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Leia este e outros textos em www.advaita.com.br<br />
– Ensinamentos do <strong>Advaita</strong> <strong>Vedanta</strong>, <strong>Ramana</strong> Maharshi, Papaji, Nisargadatta Maharaj e Mooji –<br />
66<br />
<strong>Sri</strong> <strong>Ramana</strong> <strong>Paravidyopanishad</strong><br />
211 Hay solo dos vías establecidas para el aspirante a la liberación: para el valiente,<br />
la indagación del propio Sí mismo de uno, y para el temeroso, la auto-entrega a<br />
Dios. En estas dos están incluidas todas las vías.<br />
Muchas vías son conocidas y seguidas, pero todas encajan bajo estas dos. El<br />
valiente ya ha sido descrito. El otro es el que tiene miedo del samsara, pero es incapaz<br />
de emprender la indagación enseñada por Bhagavan como la vía directa. En esta vía<br />
directa todas las nociones preconcebidas son abandonadas, como se verá más adelante.<br />
La auto-entrega es el paso final en la práctica de la devoción a Dios, la cual es la única<br />
otra alternativa a la vía directa.<br />
212 Esta vía doble ha sido enseñada por Bhagavan <strong>Ramana</strong>, así: «O bien busca la<br />
continuación.<br />
raíz del sentido del ego [el «yo» que surge dentro del cuerpo] o bien entrega ese<br />
sentido del ego a Dios para destruirlo [por Su gracia]».<br />
El advaitin que considera la devoción como inferior es censurado a<br />
213 Ese hombre necio, que considerándose él mismo como un advaitin, pero sin ser<br />
suficientemente valiente [para emprender la indagación como es enseñada por<br />
Bhagavan] y que mira con desprecio la devoción como inferior, vive en vano,<br />
sin devoción a Dios. Él es un hombre con una mente manchada.<br />
A continuación se muestra que el devoto está en una posición mejor que el resto<br />
de los hombres.<br />
214 En este samsara el devoto es como una vasija dejada caer dentro de un pozo con<br />
una cuerda atada a ella. El hombre sin devoción es como una vasija caída dentro<br />
del pozo, sin una cuerda atada a ella.