13.07.2015 Views

LIBRO DE CONCORDIA COMPLETO - Escritura y Verdad

LIBRO DE CONCORDIA COMPLETO - Escritura y Verdad

LIBRO DE CONCORDIA COMPLETO - Escritura y Verdad

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

corazón e inflamarlo para orar con gozo y amor, puesto que Dios con su palabra testimonia quenuestra oración le agrada de corazón. Además, con certeza será atendida y concedida para que nola despreciemos, ni la arrojemos al viento, ni oremos al azar. Esto se lo puedes hacer presentediciendo: "Aquí vengo, amado Padre, y no pido por mi propósito, ni por dignidad propia, sino acausa de tu mandamiento y de tu promesa que no puede fallar ni mentirme". Quien no cree en talpromesa, ha de saber una vez más que enoja a Dios como quien lo deshonra en sumo grado y lotrata de mentiroso.Además, también nos incitará y nos atraerá que, fuera del mandamiento y de la promisión,Dios se anticipe y nos ponga en la boca él mismo la palabra y el modo de cómo y qué hemos deorar, para que veamos cuan cordialmente se está ocupando de nuestra necesidad, para que demanera alguna dudemos que le agrade tal oración y que de seguro es atendida. Esto es una granventaja sobre todas las demás oraciones que podríamos excogitar nosotros, puesto que en estecaso la conciencia siempre estaría en dudas y diría: "He orado, mas, ¿quién sabe cómo esto leagrada y si he encontrado la medida y el modo adecuados?" Por ello, no se puede encontrar en latierra oración más noble, porque tiene este excelente testimonio de que a Dios le agradacordialmente oírla. Tan valiosa es que por ella no deberíamos aceptar las riquezas del mundoentero.Y también ha sido prescripta de esta manera con el fin de que veamos y consideremos lanecesidad que nos ha de impeler y obligar a orar continuamente. Pues quien quiere pedir, debeaportar, proponer y nombrar algo que desea. De otra forma no puede hablarse de oración. Enconsecuencia, desechamos con razón las oraciones de los monjes y curas que aúllan terriblementey murmuran día y noche, mas ninguno de ellos piensa en pedir siquiera una bagatela. Y sijuntásemos todas las iglesias y sus clérigos, tendrían que confesar que jamás han orado decorazón ni por una gotita de obediencia a Dios y por la fe en la promesa; tampoco considerabannecesidad alguna, sino que no pensaban en otra cosa (cuando lo hacían en la forma mejor) que enrealizar una buena obra para pagar así a Dios como gente que no quería recibir algo de él, sinoúnicamente darle.Sin embargo, allí donde haya oración verdadera es menester que sea cosa seria y que sesienta su necesidad y una necesidad tal que nos pese y nos impela a llamar y clamar. De estemodo, la oración surge espontáneamente, como es que debe surgir. No precisa de enseñanzaalguna sobre cómo debe prepararse y conseguir la devoción. Mas la necesidad que ha depreocuparnos tanto por nosotros como por todos, la hallarás con la suficiente abundancia en elPadrenuestro. Por ello, éste también servirá para que nos acordemos de ella, la contemplemos y latomemos de corazón, para que no nos cansemos de orar. En efecto, todos tenemossuficientemente cosas que nos faltan, pero la falla está en que no lo sentimos, ni vemos. Por eso,Dios quiere también que lamentes semejante adversidad y penuria y la menciones expresamente,no como si él no la conociera, sino para que tú enciendas tu corazón a fin de desear más y conmás fuerza y para que sólo extiendas ampliamente el manto y lo abras para recibir mucho.Por eso, desde la puericia debemos acostumbrarnos a orar diariamente, cada cual portodas sus necesidades dondequiera que sienta algo que le atañe, y también por las necesidades deotras personas entre las cuales vive, a saber, por los predicadores, las autoridades, los vecinos y laservidumbre, y siempre (como queda dicho) hemos de hacer presente a Dios, su mandamiento ysu promesa, y saber que-no quiere que se desprecie la oración. Lo digo, porque me gustaría.volver a difundir entre los hombres que aprendiesen a orar rectamente, en lugar de andar tanrudos y fríos, por lo cual se vuelven, cada vez más torpes para orar. Esto lo quiere el diablo ycontribuye a ello con todas sus fuerzas, puesto que bien siente el mal y el daño que se le hace,cuando la oración se practica como es debido.278

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!