19.10.2016 Views

El Conflicto de los Siglos por Elena de White [Nueva Ed.]

Se recrudece una guerra espiritual. Embatallados en El Conflicto de los Siglos, desde la eternidad pasada hasta los tiempos actuales, se están luchando dos fuerzas una contra el otra por la soberanía universal. Este libro se explica cómo inició la guerra, cómo llegará el punto culminante y cómo se terminará. Con desarrollos muy chocantes que pican la mente y despiertan las ascuas del alma, también la obra ilumina la visión y da revelación acerca de la manipulación espiritual, la política mundial, los regímenes represivos, los movimientos religiosos, los derechos y las libertades amenazados y la decodificación del misterio de la profecía.

Se recrudece una guerra espiritual. Embatallados en El Conflicto de los Siglos, desde la eternidad pasada hasta los tiempos actuales, se están luchando dos fuerzas una contra el otra por la soberanía universal. Este libro se explica cómo inició la guerra, cómo llegará el punto culminante y cómo se terminará. Con desarrollos muy chocantes que pican la mente y despiertan las ascuas del alma, también la obra ilumina la visión y da revelación acerca de la manipulación espiritual, la política mundial, los regímenes represivos, los movimientos religiosos, los derechos y las libertades amenazados y la decodificación del misterio de la profecía.

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>El</strong> <strong>Conflicto</strong> <strong>de</strong> <strong>los</strong> Sig<strong>los</strong><br />

hombres para que se excedan en cosas que son legítimas en sí mismas, a fin <strong>de</strong> que la intemperancia<br />

<strong>de</strong>bilite sus fuerzas físicas y sus energías mentales y morales. Ha hecho morir y está haciendo morir<br />

miles <strong>de</strong> personas <strong>por</strong> la satisfacción <strong>de</strong> las pasiones, embruteciendo así la naturaleza humana. Y para<br />

completar su obra, <strong>de</strong>clara <strong>por</strong> intermedio <strong>de</strong> <strong>los</strong> espíritus, que "el verda<strong>de</strong>ro conocimiento coloca a <strong>los</strong><br />

hombres <strong>por</strong> encima <strong>de</strong> toda ley;" que "cualquier cosa que sea, es buena;" que "Dios no con<strong>de</strong>na;" y que<br />

"todos <strong>los</strong> pecados que se cometen se cometen sin envolver culpabilidad alguna."<br />

Cuando la gente es inducida así a creer que el <strong>de</strong>seo es ley suprema, que la libertad es licencia y<br />

que el hombre no es responsable más que ante sí mismo, ¿quién pue<strong>de</strong> admirarse <strong>de</strong> que la corrupción y<br />

la <strong>de</strong>pravación abun<strong>de</strong>n <strong>por</strong> todas partes? Las multitu<strong>de</strong>s aceptan con avi<strong>de</strong>z las enseñanzas que les dan<br />

libertad para obe<strong>de</strong>cer <strong>los</strong> impulsos carnales. Se da rienda suelta a la lujuria y el hombre pier<strong>de</strong> el imperio<br />

sobre sí mismo; las faculta<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l espíritu y <strong>de</strong>l alma son sometidas a <strong>los</strong> más bestiales apetitos, y Satanás<br />

pren<strong>de</strong> alegremente en sus re<strong>de</strong>s a millares <strong>de</strong> personas que profesan ser discípu<strong>los</strong> <strong>de</strong> Cristo. Pero nadie<br />

tiene <strong>por</strong> qué <strong>de</strong>jarse alucinar <strong>por</strong> <strong>los</strong> asertos engañosos <strong>de</strong>l espiritismo. Dios ha dado a <strong>los</strong> hombres luz<br />

suficiente para que puedan <strong>de</strong>scubrir la trampa. Como ya lo hemos visto, la teoría que constituye el<br />

fundamento mismo <strong>de</strong>l espiritismo está en plena contradicción con las <strong>de</strong>claraciones más terminantes <strong>de</strong><br />

las Santas Escrituras. La Biblia <strong>de</strong>clara que <strong>los</strong> muertos no saben nada, que sus pensamientos han<br />

perecido; no tienen parte en nada <strong>de</strong> lo que se hace bajo el sol; no saben nada <strong>de</strong> las dichas ni <strong>de</strong> las<br />

penas <strong>de</strong> <strong>los</strong> que les eran más caros en la tierra.<br />

A<strong>de</strong>más, Dios ha prohibido expresamente toda supuesta comunicación con <strong>los</strong> espíritus <strong>de</strong> <strong>los</strong><br />

muertos. En tiempo <strong>de</strong> <strong>los</strong> hebreos había una clase <strong>de</strong> personas que pretendía, como <strong>los</strong> espiritistas <strong>de</strong><br />

nuestros días, sostener comunicaciones con <strong>los</strong> muertos. Pero la Biblia <strong>de</strong>clara que <strong>los</strong> "espíritus," como<br />

se solía llamar a <strong>los</strong> visitantes <strong>de</strong> otros mundos, son "espíritus <strong>de</strong> <strong>de</strong>monios." (Compárese Números 25:<br />

1-3; Salmo 106: 28; 1 Corintios 10: 20; Apocalipsis 16: 14.) La costumbre <strong>de</strong> tratar con espíritus o<br />

adivinos fue <strong>de</strong>clarada abominación para el Señor y era solemnemente prohibida so pena <strong>de</strong> muerte.<br />

(Levítico 19: 31; 20: 27.) Aun el nombre <strong>de</strong> la hechicería es objeto <strong>de</strong> <strong>de</strong>sprecio en la actualidad. <strong>El</strong><br />

aserto <strong>de</strong> que <strong>los</strong> hombres pue<strong>de</strong>n tener comunicación con ma<strong>los</strong> espíritus es consi<strong>de</strong>rado como una<br />

fábula <strong>de</strong> la <strong>Ed</strong>ad Media. Pero el espiritismo, que cuenta con centenares <strong>de</strong> miles y hasta con millones<br />

<strong>de</strong> adherentes, que se ha abierto camino entre las socieda<strong>de</strong>s científicas, que ha invadido iglesias y que<br />

ha sido acogido con favor entre <strong>los</strong> cuerpos legislativos y hasta en las cortes <strong>de</strong> <strong>los</strong> reyes —este engaño<br />

co<strong>los</strong>al no es más que la reaparición, bajo un nuevo disfraz, <strong>de</strong> la hechicería con<strong>de</strong>nada y prohibida en<br />

la antigüedad.<br />

Si no existiera otra evi<strong>de</strong>ncia tocante a la naturaleza real <strong>de</strong>l espiritismo, <strong>de</strong>bería bastar a todo<br />

cristiano el hecho <strong>de</strong> que <strong>los</strong> espíritus no hacen ninguna diferencia entre lo que es justo y lo que es<br />

pecado, entre el más noble y puro <strong>de</strong> <strong>los</strong> apóstoles <strong>de</strong> Cristo y <strong>los</strong> más <strong>de</strong>gradados servidores <strong>de</strong> Satanás.<br />

378

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!