Reconfigurando territorios

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FUNDACIÓN TIERRA
Paralelamente, la superficie en proceso de saneamiento
ha disminuido de 28,1% en 2005 a solamente
12,5% en 2009. Estos datos demuestran
que en cuatro años, el INRA se ha dedicado casi
exclusivamente a realizar trabajos de gabinete
para terminar con los procesos de saneamiento
iniciados en años anteriores (1996-2006) y cuyos
expedientes -por una u otra razón- estaban
demorados, paralizados u observados o en las
gavetas de las oficinas públicas, este hecho no
quita sin embargo la importancia de los logros
obtenidos en los últimos años.
Se puede concluir entonces que durante la primera
gestión gubernamental del presidente
Morales, prácticamente no se han iniciado de
manera significativa nuevos procesos de saneamiento
de tierras en el país. La principal dedicación
del INRA en estos últimos cuatro años
ha sido concluir los procesos ya iniciados y entregar
la mayor cantidad de títulos posibles por
la mayor cantidad de tierra posible, objetivo
que ha sido logrado con éxito.
En adelante, el desafío para el INRA es que necesariamente
tendrá que iniciar nuevos procesos
de saneamiento de tierras desde la primera
fase de las pericias de campo y deberá hacerlo
principalmente en la región de tierras altas
donde la tierra y los derechos propietarios están
altamente fragmentados. En esta región
(valles y altiplano) habita cerca del 83% de la
población rural del país 9 y los títulos de propiedad
de esta mayoritaria población están a
nombre de sus antepasados, abuelos o padres.
Existe un generalizado reclamo de los líderes
indígenas quechuas y aymaras por actualizar
dichos derechos familiares y comunales, tanto
en el marco de sus usos y costumbres como en
el marco de la ley estatal.
Los nuevos saneamientos a iniciarse en el año
2010 seguramente incluirán también las superficies
de tierras de las llanuras benianas, dedicadas
a la ganadería extensiva de corte latifundiario y
las tierras de la denominada “Región Integrada”
del departamento de Santa Cruz que es el corazón
del modelo agro exportador del monocultivo
de la soya y derivados y es el lugar donde la
tierra tiene los más altos precios de toda Bolivia.
Más de 2.000 dólares por hectárea (World Bank,
2007). Pero además, asumiendo el mandato de
la Ley de Reconducción Comunitaria de la Reforma
Agraria (2006), el INRA debe realizar la
verificación física (visita de campo, observación
directa en terreno) del cumplimiento de la FES
de medianas y grandes propiedades. Esta disposición
no se ha cumplido todavía 10 .
2.2 Titulación de Tierras Comunitarias de
Origen (TCO) y de comunidades
Alrededor de un 53% de las tierras tituladas
desde 1996 corresponden a propiedades comunales
y Tierras Comunitarias de Origen
(TCO) o territorios indígenas de tierras bajas
y altas, con superficies muy extensas pero en
general, con baja densidad demográfica. En
este periodo se han titulado 149 TCO con una
superficie de 15,5 millones de hectáreas 11 , de
9 INE, Censo Nacional de Población y Vivienda 2001.
10 Es muy probable que esta disposición no se aplique de manera uniforme y estandarizada a todos los predios mayores a
la pequeña propiedad (con exclusión de las propiedades tituladas colectivamente), sino según criterios de priorización
que definirá el Estado.
11 Extensión mayor a toda la superficie de Nicaragua, el país más grande de Centro América (cerca de 13 millones de hectáreas,
sin contar la superficie de sus numerosos lagos). En la República de Nicaragua habitan aproximadamente 6 millones
de ciudadanos de los cuales 2 millones en el campo y 4 millones en las ciudades. En Colombia, país que tiene una superficie
un poco mayor a la de Bolivia (114 millones de hectáreas comparadas con las 108 millones de hectáreas de Bolivia),
existen 710 Resguardos Indígenas por una superficie global de 35 millones de hectáreas de tierras amazónicas y de llanuras,
donde viven alrededor de 940.000 personas pertenecientes a 86 pueblos indígenas que hablan 64 lenguas nativas. Son
el 2,2% de la población total de Colombia estimada en 43 millones de habitantes. De esos 43 millones el 29% vive en áreas
rurales, de los cuales la mayoría son considerados mestizos y campesinos. A diferencia de los que ocurre en Bolivia, en el
marco de la nueva Constitución, en estos Resguardos, los pueblos indígenas de Colombia, no gozan del derecho al uso y
aprovechamiento exclusivo de los recursos naturales renovables (www.acnur.org en base a datos del DANE, 2005).