10.11.2014 Views

Pideme-Lo-Que-Quieras

Pideme-Lo-Que-Quieras

Pideme-Lo-Que-Quieras

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Él asiente.<br />

—Raquel, danos un momento. En seguida regresamos.<br />

—Vale, cuchufleta.<br />

Eric me mira y me pregunta desconcertado:<br />

—¿Cuchufleta?<br />

Le pellizco en el brazo.<br />

—Ni se te ocurra llamarme así, ¿entendido?<br />

Entre risas, regresamos a la habitación. Nos vestimos en pocos minutos, y acto<br />

seguido salimos al encuentro de mi hermana en el salón.<br />

Ésta, al vernos, mueve la cabeza en tono de reproche. La cojo del brazo y me la<br />

llevo a la cocina.<br />

—Ven, Raquel… acompáñame.<br />

Eric y la pequeña se quedan en el salón. Cuando entro con mi hermana en la cocina,<br />

susurro:<br />

—¿Quieres hacer el favor de llamar a la puerta antes de entrar?<br />

—Yo… yo… lo siento. Pero al veros desnudos… y estar con Luz…<br />

—Raquel… deja de balbucear. Y tranquila, Luz no ha visto nada que la vaya a<br />

traumatizar. Pero te aseguro que si llegáis a aparecer cinco minutos antes, quizá sí, por lo<br />

tanto, por favor, llama antes de entrar, ¿vale?<br />

—Vale… y… ¡Oh, Judith! Es Eric, verdad?<br />

—Sí.<br />

—Qué bien, cuchufleta. ¿Os habéis arreglado?<br />

—De momento parece que sí.<br />

—Oh, cuánto me alegro —salta mi hermana feliz por mí.<br />

—Y yo…<br />

Raquel sonríe y se me acerca.<br />

—Qué contento se va a poner papá. Me habló de él y me dijo que le cayó muy bien<br />

este chico. Por cierto… qué culo más bonito tiene.<br />

—¡¿Raquel?! —Río divertida.<br />

—¡Ay, hija…! ¿Qué quieres que te diga? No he podido remediar fijarme. Tiene un<br />

culo precioso.<br />

—Sí. No lo niego.<br />

—Y qué pedazo de espalda… Y no te digo nada de lo otro que he visto, que… ¡Oh,<br />

Diossssssssss…!<br />

—Para… —Río—. Para… que te conozco.<br />

Mi hermana también está riéndose.<br />

—<strong>Que</strong> sepas que tienes mucha suerte de que él sea tan grande. Ya me gustaría a mí<br />

que mi Jesús me pudiera coger en brazos como él te tenía a ti. ¡Oh, Dios… que me acaloro!<br />

Anda, toma. Venía a traerte unas croquetas y… perdona por haber aparecido en un<br />

momento así.<br />

Dos minutos después, mi hermana y mi sobrina se van. Eric me mira.<br />

—¿Sabes lo que me ha dicho tu sobrina?<br />

Convencida de que esa pequeña bruja ha soltado alguna de sus lindezas, lo miro y él<br />

comienza a desternillarse de risa.<br />

—Literalmente ha dicho: «Como vuelvas a darle otro azote a mi tita, te doy una<br />

patada en las pelotas que te las dejo de corbata».<br />

Me tapo la boca y abro los ojos como platos antes de reír a carcajadas. Eric, al ver

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!