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Maternidad y Sexo Estudio Psicoanalitico y - Comunitarios.cl

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de las dueñas de casa sobre el servicio doméstico provienen<br />

de esta identificación inconsciente. En primer término, las actividades<br />

de las sirvientas son muy parecidas a las que desempeña<br />

la madre frente al niño: la sirvienta tiene el deber de<br />

alimentar, cuidar y limpiar.<br />

En contraste con esa similitud está la dependencia e inferioridad<br />

social de la sirvienta frente a la patrona, que le<br />

permite a ésta realizar una vieja e infantil fantasía vengativa:<br />

trastocar los papeles. Fantasía que expone a menudo el niño<br />

pequeño frente a su madre con las siguientes palabras: "Ya<br />

verás cuando yo sea grande y tú seas chiquita". Todo lo que<br />

la niña sufre por su dependencia de la madre y por su obligación<br />

de obedecerla puede ahora hacérselo experimentar a la<br />

sirvienta. Todas las críticas a su madre que hubo de reprimir<br />

durante su infancia pueden expresarse más tarde y con toda<br />

<strong>cl</strong>aridad frente a la sirvienta. En ella puede vengarse de las<br />

frustraciones sufridas en la niñez (3). Todo el odio reprimido<br />

que tampoco ya adulta la mujer se atreve a manifestar a su<br />

madre, lo descarga contra la sirvienta. La teme y la cree capaz<br />

de cualquier atrocidad debido a este mismo odio. Muchas<br />

mujeres creen continuamente que las sirvientas las perjudican,<br />

las roban y les seducen a sus maridos o hijos.<br />

Una de las causas por las cuales el cuento del niño asado<br />

fue aceptado como verídico proviene de esta situación inconsciente<br />

entre ama de casa y sirvienta. Por todo lo expuesto<br />

parece que nos encontramos con variantes de una misma<br />

situación, en la que siempre el hijo o la hija es víctima de una<br />

madre criminal.<br />

La persona que se conmueve al escuchar el relato siniestro<br />

se identifica con el niño, víctima inocente de la sirvienta-madre<br />

mala, sintiendo simpatía y compasión por la joven<br />

señora, en la cual proyecta la imagen consciente y buena que<br />

tiene de su propia madre. Ya dijimos cómo por los celos reprimidos<br />

en la infancia se llega a atribuir a un sustituto mater-<br />

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no el extraño deseo de comer a su hijo. Además existe otra<br />

causa más profunda para ello. Siguiendo la ley del Talión, la<br />

persona que cree en los deseos caníbales de la madre y se<br />

identifica con la víctima teme sufrir de la madre mala lo que<br />

ella misma, en su primera infancia, quiso hacerle.<br />

Le atribuye sus propios deseos perversos, para poder<br />

condenar en la madre lo que se niega a reprocharse a sí<br />

misma. Tendré que demostrar, pues, que el crimen primitivo<br />

de nuestro mito sería el haber querido devorar a la madre y<br />

que el verdadero criminal sería la víctima aparente, el niño.<br />

Para ello volvamos al material relacionado por su contenido<br />

con nuestro mito.<br />

El castigo de Tántalo consiste en la condena a la sed<br />

eterna y en ver cómo se retiran las ramas llenas de fruta<br />

cuando extiende su mano para alcanzarlas. Las frutas son<br />

símbolos del pecho femenino. Se deduce, por el carácter del<br />

castigo mismo, que su crimen primitivo fue la voracidad de su<br />

hambre. La situación aparece en el mito, transformada en su<br />

contraria.<br />

No es él quien quiere comer a su madre, sino que su hijo<br />

-representante de su infancia- es quien sirve de manjar a Ceres.<br />

Blancanieves cae como muerta después de haber comido<br />

la manzana envenenada que le ofrece su madrastra, es<br />

decir, es castigada por su glotonería, por haber deseado comer<br />

el pecho de su madre hostil.<br />

En "H)nsel y Gretel" los niños son expulsados de la casa<br />

por su voracidad (ya no es posible alimentarlos) y la bruja los<br />

sorprende y castiga cuando los niños comen parte de su casa.<br />

También la casa constituye un símbolo materno muy conocido<br />

en psicoanálisis.<br />

En el mito de las "vehinihai" no aparece el hambre del<br />

niño castigado.<br />

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