R LA MEMORIA 8 2008.indd - Adipymes

La “Catedral” de Arucas o un susto recuperado
En aquel tiempo, las conferencias se realizaban en una habitación muy larga,
sobre una especie de mostrador lleno de clavijas y botones, que llamaban el
cuadro. Las telefonistas, al comunicar con otras centrales y dado el trato frecuente,
se conocían todas “de oídas”.
Como jóvenes que eran, procuraban hablar de otras cosas que no fueran
las propias del trabajo: qué hacían en su tiempo libre, novios, pretendientes…Y,
burlando la aviesa atención de las vigilantes y jefas, aprovechaban para
contarse sus, digamos, aventuras. Con frecuencia, Melucha comunicaba con
las telefonistas de la Central de Arucas (que, dicho sea de paso y en honor
a la verdad, estaban estupendamente bien adiestradas gracias a las lecciones
de la primera telefonista, Consuelo). Al terminar la conferencia con alguna de
Arucas, Melucha siempre terminaba diciendo:
-Adiós, recuerdos al diablo.
-Pero, muchacha, ¿qué diablos dices?
-Nada, nada…
Y, sonriendo para sus adentros, retiraba la clavija a toda prisa, no se fuera a
fijar en ella la vigilanta de turno y la pescara en falta…
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…Y aquí entra una antigua tía de Melucha, que no es que quiera ser ella la
que diga la última palabra, sino porque conserva unas inolvidables memorias
de Arucas.
Esta anciana tía, desde siempre tuvo la hospitalaria costumbre (la hospitalidad
siempre fue un gran patrimonio canario) de llevar a las visitas que le venían
“de p’afuera” a visitar Arucas y otras localidades de Gran Canaria, aparte
de la Playa de Las Canteras, por supuesto.
La inolvidable poeta Gloria Fuertes, hace ya bastantes años, pasó un mes
de noviembre invitada en casa de la tía de Melucha. Por supuesto, no podía
faltar la visita a Arucas, subiendo primeramente al mirador. Gloria Fuertes
se sintió tan sobrecogida ante el increíble panorama que se divisa desde allí,
que la mencionada tía aprovechó (habladora, como siempre) para resumirle
brevemente a Gloria una sucinta historia económica de Arucas: que el plátano
sustituyó a la caña de azúcar, que a su vez había sustituido a la cochinilla, culti-
Gran Canaria
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