27.07.2018 Views

Manual de Psicologia Criminal

Los últimos meses del año 1.888 fueron conocidos en la Inglaterra victoriana de finales del siglo pasado como “el otoño del terror”, debido a una serie de brutales crímenes cometidos por un misterioso y tristemente famoso asesino conocido como “Jack el Destripador”, cuya identidad, todavía hoy, sigue sin conocerse. Posiblemente, si los sufridos agentes de Scotland Yard encargados de la investigación hubieran contado con los conocimientos que actualmente ofrece la Psicología Criminal para la investigación de delitos similares, el resultado hubiera sido diferente. Pero justamente en aquella época se despertaba el interés científico por esta disciplina, que comenzó su andadura de la mano de criminólogos por un camino paralelo que hasta hace muy pocos años no confluyó con el de los sucesores de aquellos primeros policías encargados de identificar, perseguir y capturar a los muchos asesinos múltiples que pueblan las páginas de la crónica del crimen. Pero unos años antes, y para movernos en el marco histórico adecuado, se produjeron diversas aportaciones al saber criminológico que tuvieron su influencia en el posterior desarrollo de la psicología criminal, provenientes de distintos campos empíricos, que veremos someramente.

Los últimos meses del año 1.888 fueron conocidos en la Inglaterra
victoriana de finales del siglo pasado como “el otoño del terror”, debido a una
serie de brutales crímenes cometidos por un misterioso y tristemente famoso
asesino conocido como “Jack el Destripador”, cuya identidad, todavía hoy,
sigue sin conocerse. Posiblemente, si los sufridos agentes de Scotland Yard
encargados de la investigación hubieran contado con los conocimientos que
actualmente ofrece la Psicología Criminal para la investigación de delitos
similares, el resultado hubiera sido diferente.
Pero justamente en aquella época se despertaba el interés científico
por esta disciplina, que comenzó su andadura de la mano de criminólogos
por un camino paralelo que hasta hace muy pocos años no confluyó con el
de los sucesores de aquellos primeros policías encargados de identificar,
perseguir y capturar a los muchos asesinos múltiples que pueblan las
páginas de la crónica del crimen.
Pero unos años antes, y para movernos en el marco histórico
adecuado, se produjeron diversas aportaciones al saber criminológico que
tuvieron su influencia en el posterior desarrollo de la psicología criminal,
provenientes de distintos campos empíricos, que veremos someramente.

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

ataque directo a la víctima, sin interacción verbal, más propio <strong>de</strong> asesinos<br />

jóvenes, inexpertos o <strong>de</strong>sorganizados.<br />

- El modo en que se relacionó con ella mientras la tuvo con vida:<br />

Incluye la interacción verbal y física: Respecto a la interacción verbal<br />

<strong>de</strong>stacan las estrategias <strong>de</strong> control, los recursos verbales y el grado <strong>de</strong><br />

violencia y sexo verbalizado. En cuanto a la interacción física ofrecen gran<br />

información tanto el método <strong>de</strong> control utilizado como los actos ejercidos<br />

sobre la víctima antes y <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> su muerte. Veamos algunos:<br />

El método <strong>de</strong> control utilizado incluye tanto el tipo <strong>de</strong> materiales<br />

utilizados (cuerdas, ca<strong>de</strong>nas, grilletes, prendas <strong>de</strong> la víctima) como su grado<br />

<strong>de</strong> complejidad. La utilización <strong>de</strong> un sofisticado sistema para controlar a la<br />

víctima nos indica la aptitud mental <strong>de</strong>l agresor y su grado <strong>de</strong> sadismo. El<br />

uso excesivo <strong>de</strong> ligaduras pue<strong>de</strong> ser signo <strong>de</strong> inexperiencia o <strong>de</strong> fuerte<br />

necesidad <strong>de</strong> control. El tipo <strong>de</strong> material utilizado (por ejemplo, un<br />

<strong>de</strong>terminado tipo <strong>de</strong> cinta aislante) pue<strong>de</strong> indicar la posibilidad <strong>de</strong> que el<br />

agresor lleve un “equipo <strong>de</strong> violación o asesinato” que pue<strong>de</strong> servir como<br />

importante prueba material, e incluso la probabilidad <strong>de</strong> tenencia <strong>de</strong><br />

antece<strong>de</strong>ntes penales.<br />

También proporciona gran cantidad <strong>de</strong> información la correcta<br />

interpretación <strong>de</strong> los actos ejercidos con la víctima antes y <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> su<br />

muerte:<br />

- Actos <strong>de</strong> <strong>de</strong>spersonalización, como tapar el rostro <strong>de</strong> la víctima.<br />

- Actos <strong>de</strong> <strong>de</strong>femeinización, como la extirpación <strong>de</strong> senos u órganos<br />

genitales).<br />

- Conductas <strong>de</strong> esclavitud sexual (“bondage”) con la víctima.<br />

- Evi<strong>de</strong>ncias <strong>de</strong> tortura. En este sentido, pue<strong>de</strong> ser difícil distinguir entre<br />

aquellas lesiones causadas con la intención <strong>de</strong> aumentar el sufrimiento <strong>de</strong> la<br />

víctima (como por ejemplo el apuñalamiento repetido, acto íntimamente<br />

relacionado con la satisfacción sexual <strong>de</strong> su autor) <strong>de</strong> aquellas otras en las<br />

que la intención es explorar el cuerpo humano con curiosidad morbosa,<br />

como las evisceraciones propias <strong>de</strong> asesinos jóvenes muy <strong>de</strong>sorganizados.<br />

- Presencia <strong>de</strong> actos antropofágicos.<br />

- Introducción <strong>de</strong> objetos.<br />

- Evi<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> conductas fetichistas.<br />

- El método empleado para <strong>de</strong>shacerse <strong>de</strong>l cadáver. De entre ellos, los más<br />

habituales son: arrojarlo al agua, enterrarlo, quemarlo, abandonarlo (vía<br />

pública, vehículo, zona boscosa, edificio, verte<strong>de</strong>ro), o diseminarlo (mediante<br />

<strong>de</strong>smembramiento).<br />

Formació on-line<br />

C/ Rambla <strong>de</strong>l Raval 29-35 local 5. 08001 Barcelona.- Tel. 93 342 68 10 - Fax. 93 342 68 11 www.sap-ugt.cat sap@sap-ugt.cat

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!