Año 12, t. 16, entrega 1 (1905) - Publicaciones Periódicas del Uruguay

Anales de la Universidad 33
Alemania nos ofrece otro ejemplo semejante con su septenado militar,
resultado de las tendencias hacia la más sólida.organización
guerrera del país. El efectivo del ejército es votado por el término de
siete años consecutivos. Los gastos para su mantenimiento, en cambio,
reciben la sanción anual del Reichstag. Esta última salvedad no le
da al parlamento nlemán, sin embargo, el menor poder para negar
fondos, pues una vez votado el efectivo del ejército, la Asamblea no
tiene más remedio que acceder á las demandas de créditos del Gobierno
tendentes á sufragar todos los gastos necesarios á la organización
militar. Dichas erogaciones, por lo tanto, vienen á ser también, indirectamente,
votadas por siete años.
Independientemente de esta sanción normal del Presupuesto por
un plazo dado de tiempo, existen algunas sanciones anormales por un
plazo menor: Presupuestos mensuales, por ejemplo, votados precipitadamente
para atender á los gastos hasta que el nuevo Presupuesto
General quede sancionado. Estas irregularidades financieras tienen
una historia larga y tumultuosa en el régimen francés bajo la denominación
de duodécimos provisorios, nombre que da á entender el carácter
mensual y transitorio que tienen dichos Presupuestos.
En Inglaterra se han extendido los llamados votos on account que
son verdaderos votos parciales de servicios distintos y autorizaciones
parciales también para los pagos que se van realizando á medida que
se discute el Presupuesto. El Presupuesto General aparece más tarde,
cuando ya se han ido ejecutando los parciales con el nombre de act
of appropria'ion, que confirma y recapitula los votos parciales.
La costumbre inveterada en la República no es la de sancionar en
tales casos, presupuestos pasajeros, sino la de prorrogar en su totalidad
el Presupuesto vigente hasta que se sancione el nuevo, ó bien,
cuando el tiempo falta, materialmente, prorrogar el Presupuesto vencido
para todo el próximo ejercicio económico.—En medio á nuestros
graves desórdenes administrativos del pasado, ese ha sido el expediente
más usual y casi la práctica constante durante largos períodos.
Sin ir muy lejos, la Comisión de Presupuesto del Consejo de
Estado de 1898, decía en el comienzo de su informe de Presupuesto
para aquel año económico :
«El último Presupuesto General de Gastos sancionado de acuerdo
con los preceptos de la ley constitucional de la República, fué el que
rigió durante el ejercicio económico de 1893-94—lo que vale decir que
durante el período administrativo que corresponde á una presidencia
ó sea durante cuatro años, el país ha vivido sin conocer el monto de
los gastos públicos».
Anomalías semejantes se han producido más de una vez en nueetra
accidentada vida administrativa.