Año 12, t. 16, entrega 1 (1905) - Publicaciones Periódicas del Uruguay

38 Anales de la Universidad
dado el Cuerpo Legislativo en el Presupuesto. La Cámara de entonces^
en que figuraban los más distinguidos ciudadanos del país, intentó
someter al Poder Ejecutivo ajuicio político por violador de la ley;
pero al fin se aconsejó la sanción de un proyecto interpretativo del
artículo en cuestión, redactado en estos términos:
Artículo 1.0 La organización que el Cuerpo Legislativo haya
dado en el Presupuesto General de Gastos á cada uno de los ramos
de la Administración Pública no podrá ser alter ida ni modificada por
el Poder Ejecutivo so pretexto de mejor servicio público y de considerarse
dentro del rubro presupuestado para ese ramo.»
Art 2.0 Cuando el Poder Ejecutivo hubiera sido autorizado para
hacer trasposiciones y modificaciones en el Presupuesto, esta autorización
se entenderá sin perjuicio de conservar la organización impuesta
or la ley de Presupuesto.
La mayoría de la Cámara no creyó que el precedente proyecto diese
verdaderamente en la tecla, haciendo notar el seRor Agustín de Vedia
que la falta cometida por el Poder Ejecutivo no estaba, á su juicio,
en el desconocimiento de la organización dada por el Cuerpo
Legislativo á los ramos de la Administración pública, sino en invertir
los dineros del Estado en forma diversa á la sancionada por la ley.
El artículo de la ley que comentamos, tal cual lo sancionaban los
parlamentos hasta hace muy pocos años, dejaba libre el camino para
la comisión de actos inconstitucionales. Así por ejemplo: existe en
una planilla cualquiera un rubro expresamente destinado á un empleado
determinado; el Poder Ejecutivo por conveniencia ó economía
no provee dicho empleo y más tarde se le ocurre destinar esa partida
para cualquier otra dotación que él considere conveniente, y no presupuestada.
La violación de ]a Constitución se convierte de esa manera
en irremediable, ocultándola, no obstante, el Poder Ailministrador
bajo la facultad que se le ha concedido de hacer trasposiciones, según
su entender, siempre que ellas no perjudiquen el buen servicio público.
Muchos gobiernos, utilizando ese artículo se han creído en el
caso de establecer y suprimir empleos, determinando sus atribuciones y
aún aumentando ó disminuyendo sus sueldos, cometidos éstos de exclusiva
incumbencia de la Asamblea General. Por otra parte la forma
minuciosa en que se discute nquí el Presupuesto excluiría la admisión
de estas posibles corruptelas administrativas para las cuales !;e deja
puerta franca al Poder Ejecutivo.
Algo se ha adelantado últimamente. Ahora dicho artículo se sanciona
con grandes restricciones. Las trasposiciones se autorizan siempre
que no se trate de crear ó suprimir empleos, de alterar los sueldos,
ni de excederse en las erogaciones, debiendo el Poder Ejecutivo dar
cuenta á la Asamblea de acuerdo con el artículo 82 de la Constitución.
Es un paso dado en el camino de la eliminación absoluta de ese
artículo vicioso.