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Vascular, casi todos de forma indirecta y menos
directa, han estado desarrollando, a veces de
forma inconsciente, actividades con este fin,
pero también hay que reconocer que son de
escaso nivel, salvo algunas excepciones.
No obstante, los miembros que fundaron la
Sociedad Española de Angiología y Cirugía
Vascular, independientemente de lo reflejado
en los estatutos, se centraron y esmeraron
en potenciar un campo de conocimiento, que
posteriormente se cristalizaría en especialidad
en nuestro país, coordinando acciones e
intercambiando información y conocimiento,
muy especialmente a través de los encuentros
personales de las jornadas angiológicas
y, por otro lado, con el órgano oficial de transmisión
del conocimiento angiológico, que
representaba la revista Angiología. Así los primeros
socios, integrantes de la Sociedad, la
gran mayoría desaparecidos, probablemente
no te nían entre sus objetivos, como acción
prioritaria, la actividad investigadora, sino
más bien desarrollar una parcela científica
desde el punto de vista profesional asistencial,
logrando el reconocimiento administrativo
y social.
Los estatutos de la Sociedad Española de
Angiología y Cirugía Vascular recogen, como
en casi la totalidad de las sociedades científicas,
desarrollar el perfil investigador y entre
sus fines suele estar promover e impulsar la
investigación del campo de conocimiento de
su competencia, aunque evidentemente no se
pormenoriza cómo se va a realizar esta acción.
Así, en los estatutos de la Sociedad 4 se refleja
este aspecto y está contemplado actual mente
en el Artículo 8.º, donde dice tex tualmente:
«ARTÍCULO 8.º
El fin fundamental y esencial de la Sociedad
Española de Angiología y Cirugía Vascular
HISTORIA DE LA SEACV. 50.º ANIVERSARIO. 1959-2009
es contribuir al progreso de la especialidad
en todos sus aspectos».
Para ello, se fijan los siguientes objetivos:
«1.º Promover y realizar estudios de investigación
en los ámbitos de la epidemiología;
investigación básica y clínica; prevención; diagnóstico
y tratamiento de las enfermedades
arteriales, venosas y linfáticas».
El Capítulo de Flebología, de más reciente
constitución, también lo contempla, y señala
en sus estatutos: «Promover las investigaciones
epidemiológicas, etiopatogénicas y terapéuticas
sobre las enfermedades venosas e
impulsar el estudio de factores socioeconómicos
que incidan en ellas», cambiando de esta
forma el matiz más genérico reflejado en el
texto de los estatutos de la Sociedad Española
de Angiología y Cirugía Vascular.
El Capítulo de Cirugía Endovascular, de forma
más escueta, también se preocupa de la
faceta investigadora, aunque lo manifiesta de
manera más taxativa y quizá genérica, señalando:
«Promover la investigación en el campo
de la cirugía endovascular».
En un momento determinado, se consideró
por parte de algún socio promover la existencia
de un capítulo de investigación vascular
y, a mediados de los años 1990, se promovió
y realizó una propuesta para ello, que no
llegó a materializarse. Posiblemente no tiene
sentido crear un apartado dentro de la
Sociedad para desarrollar o potenciar una actividad
que creo que hay que considerar implícita
en la actividad profesional de la especialidad.
Actividad asistencial, docencia e
investigación deben promoverse y permanecer
unidas, y no parece lógico que exista un
apartado de investigación independiente dentro
de la Sociedad.