06.07.2014 Views

www.flacsoandes.edu.ec

www.flacsoandes.edu.ec

www.flacsoandes.edu.ec

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

sel<strong>ec</strong>ción y adaptación de discursos europeos sobre América en un afán de crear<br />

estados, naciones y territorios autónomos, independientes y d<strong>ec</strong>olonizados.<br />

Nacionalismo y ciencia<br />

En este trabajo fue muy importante la discusión sobre el nacionalismo (o la<br />

particularidad) y la ciencia (o la universalidad). Queremos hacer algunas<br />

puntualizaciones al resp<strong>ec</strong>to. En la última parte del siglo XIX, que es el periodo en el<br />

que nos hemos concentrado, la ciencia es considerada como un elemento primordial del<br />

progreso y es un requisito irrenunciable para concebir las naciones (Tenorio, 1998:<br />

173). Pero, como afirma Tenorio (1998:14) se entiende la ciencia como una “forma<br />

paranacional, natural y objetiva” de la producción y conocimiento humano. Así, a pesar<br />

de que es producida en diferentes escenarios nacionales, la ciencia se considera<br />

universal; “una forma de conocimiento libre de contextos nacionalistas” (Tenorio, 1998:<br />

173). De esta manera, se define una dinámica entre la ciencia y el nacionalismo donde<br />

existe una tendencia de marcar todo conocimiento en un formato científico, en medio de<br />

un consenso paranacional sobre la ef<strong>ec</strong>tividad de este conocimiento. Esta tendencia se<br />

refleja claramente en el trabajo de los geógrafos que hemos analizado ya que intentan,<br />

de diversas maneras, proy<strong>ec</strong>tar su trabajo local en función de un horizonte universal de<br />

conocimiento que es el que justifica sus esfuerzos. La ciencia es abanderada de un<br />

discurso universal mucho más que de un discurso nacional.<br />

Esta tendencia cambia radicalmente en el transcurso del siglo XX donde se<br />

instala un enfoque de tipo nacionalista mucho más fuerte. La manera en que se trata el<br />

aporte del mapa de Pedro Vicente Maldonado es un claro ejemplo de este cambio 354 . De<br />

h<strong>ec</strong>ho, Maldonado no apar<strong>ec</strong>e más que citado como una fuente de información, dentro<br />

de las geografías que hemos analizado. No se encuentran las evidencias de la figura de<br />

Maldonado como un gran héroe nacional en el desarrollo del discurso cartográfico en el<br />

siglo XIX. Al par<strong>ec</strong>er, este rescate de Maldonado es parte de un discurso geográfico<br />

nacionalista propio del siglo XX. De h<strong>ec</strong>ho, al hacer una genealogía de la geografía<br />

<strong>ec</strong>uatoriana, llama la atención que Terán (1990), que es un geógrafo del siglo XX, no<br />

hace ningún énfasis en la influencia de los geógrafos europeos. El autor trata de<br />

354<br />

Agradezco las reflexiones de Sarah Radcliffe que me dieron luces sobre este tema.<br />

231

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!