Escola d'estiu 2009: Caos i diversitat, educar - Associació de ...

Joan Majó
anticipada, con unas condiciones dignas. Realmente, en contra de lo
que mucha gente piensa, el trabajo de la educación es agotador y
desgastador. Creo que es bueno que entre gente joven con ilusión,
con fuerza, reconocer a las personas que se han pasado media vida
trabajando con una jubilación digna o asignándoles otro tipo de funciones,
pero que no estén directamente con los niños. No hay que
desaprovechar su gran experiencia.
Creo que también sería bueno revisar las oposiciones, que ahora no
garantizan que los que pasen sean los mejores, pero como hace mucho
tiempo que están así no se cambia nada. Hay que modificar el
sistema de oposición; las actuales no son la mejor manera de seleccionar
a los maestros. ¿Cuál es la mejor manera? Sentémonos, hablémoslo
y dialoguemos, y tomemos como referencia una vez más lo que ya
está funcionando en las escuelas. ¿Qué es lo que realmente te va ayudar
a saber quién puede ser el mejor o el peor maestro?
Voy a terminar con dos comentarios. En la educación ocurre como en
fútbol: todo el mundo entiende, todo el mundo se atreve a hablar de
educación o a cuestionar al maestro. Yo creo que esto viene, una vez
más, del cambio de los valores: como el dinero es el valor número
uno, el que tiene dinero se cree que el maestro está a su disposición.
Entonces al final quien manda en la escuela es el papá del niño, y yo
creo que no tiene que ser así. Hay que recuperar la dignidad y el valor
del maestro.
Finalmente, vuelvo a un tema del que el señor Majó también puede
hablar ampliamente: el tiempo libre. Pongo un ejemplo: desgraciadamente,
esta semana murió Vicente Ferrer. Este personaje significaba
una alternativa educativa, económica y política, los tres puntos de referencia
que les decía antes, y la televisión ha hablado de él. Este señor
estaba planteando, y además se creía, que es posible acabar con el
hambre en el mundo. Yo también, y supongo que muchos de ustedes
también piensan lo mismo, pero hace falta voluntad política, poner
una economía a su función y tener unos valores educativos. El tiempo
que le han dedicado a la historia de Vicente Ferrer en comparación al
tiempo que le han dedicado los medios de comunicación a la muerte
de Michael Jackson, contra el cual yo no tengo nada como cantante, es
increíble. La televisión sigue teniendo un potencial enorme en la transmisión
de valores, y resulta que ha quedado mucho más importante la
muerte de un cantante, con todos mis respetos, que la muerte de una
36 44a Escola d’Estiu de l’Associació de Mestres Rosa Sensat