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Officium Veneris - Telecable

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flejando el signo de interrogación que es nuestro rostro. Voluntad<br />

infinita que inventa el tiempo para perseguir tan sólo la sombra<br />

de sí misma. El rostro de la diosa embadurnado de lefa no provoca<br />

una pregunta sobre las causas o las sensaciones; es en sí una respuesta<br />

a la que ninguna certidumbre sobrevive. El mundo de después<br />

tenemos que inventarlo desde cero.<br />

Termino de escribir esta crónica pasmosa a las once de la noche.<br />

Por fin Joaquín se despertó y fuimos a comer a un restaurante<br />

tranquilo de las afueras. Cambiamos impresiones sobre la increíble<br />

historia. Hablábamos mientras comíamos:<br />

JOAQUÍN.– Mira, esto me lo esperaba yo. Corren rumores, sabes.<br />

Pero te juro que algo así no me había pasado nunca. ¿A ti<br />

también te la chuparon entre las dos?<br />

YO.– También, también. Deben tener una pauta más o menos<br />

marcada. Es como un ritual.<br />

J.– Bueno. Esto creo que pone en cuestión tus ideas sobre la<br />

monogamia. Estas chicas parecen formar una pareja feliz.<br />

Y.– Sí, es cierto. Han encontrado un buen sistema. Es envidiable.<br />

Pero pienso que a una pareja heterosexual le resultaría más<br />

difícil que el truco funcionase. Ella podría regalarle una mujer a<br />

él, o él un hombre a ella, pero en la relación triangular me temo<br />

que aparecerían demasiados fantasmas.<br />

J.– No sé. No necesariamente. Mira, me acuerdo de un caso<br />

que me ocurrió en París que te va a interesar. Yo tenía un compañero<br />

en el Hospital; un hombre de lo más normal por otra parte.<br />

Estaba casado con una chica bastante más joven que él, pero la<br />

cosa no parecía pasar de ahí. Nos llevábamos muy bien. Bueno,<br />

pues un día entra en mi despacho y me pide…<br />

Y.– No me digas más, que te folles a su mujer.<br />

J.– Eso mismo. Mira, yo le conté que me parecía muy raro lo<br />

que me pedía, que eso iba a afectar a nuestra relación, que un<br />

polvo no vale un amigo, y todo eso.<br />

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