Stony Brook University
Stony Brook University
Stony Brook University
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
asimismo de que ya recorre “lo oscuro progresivo y fugitivo”. El mulo no siente<br />
su misión, decía el poema, pero la misión existe. El “centro” de esa misión es la<br />
“carga de plomo” en las entrañas necesaria para continuar indefinidamente<br />
“cayendo en el abismo”.<br />
El mulo no tiene “alas”, y de tenerlas, son “alas ciegas”. La “carga de<br />
plomo” impide su “dispersión” en la caída. El mulo está, escribe Lezama Lima,<br />
“seguro”. Se encuentra nada menos que “fajado por Dios”:<br />
Seguro, fajado por Dios,<br />
entra el poderoso mulo en el abismo.<br />
Las sucesivas coronas del desfiladero<br />
—van creciendo corona tras corona—<br />
y allí en lo alto la carroña<br />
De las ancianas aves que en el cuello<br />
muestran corona tras corona. (144)<br />
La complejidad del poema es aquí extraordinaria. El mulo, que es<br />
poderoso, mitad caballo mitad asno, entra en el abismo, atraviesa sucesivas<br />
esferas (esferas no celestes) que van creciendo progresivamente, que nunca<br />
terminan, donde el fondo—que no el cielo—no se alcanza a divisar. En ese cielo,<br />
mientras tanto, la “carroña” de las “ancianas aves” (acaso la antigua<br />
trascendencia) muestra sin embargo el camino de abajo. En sus cuellos se reflejan<br />
las mismas esferas o “coronas” progresivas en un ámbito sagrado de<br />
correspondencias mutuas.<br />
El poema continúa con la siguiente revelación: el mulo, que otrora parecía<br />
poderoso, “no puede, no crea ni persigue”, lo cual equivale a preguntarse, “¿no<br />
130