Catecismo Romano - amor de la verdad
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nosotros, y nuestra compañía sea con el Padre, y con su Hijo Jesucristo” 393 . Esta compañía consiste en <strong>la</strong><br />
Comunión <strong>de</strong> los Santos, <strong>de</strong> que en este artículo se trata. Y ojalá imitasen los pre<strong>la</strong>dos en su explicación el<br />
<strong>de</strong>svelo <strong>de</strong> San Pablo 394 y <strong>de</strong>más Apóstoles: por que a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> ser el<strong>la</strong> una exposición <strong>de</strong>l artículo prece<strong>de</strong>nte y<br />
una doctrina <strong>de</strong> copiosos frutos, <strong>de</strong>c<strong>la</strong>ra también cuál <strong>de</strong>ba ser el uso <strong>de</strong> los misterios que se contienen en el<br />
Símbolo, pues todos ellos se <strong>de</strong>ben investigar y enten<strong>de</strong>r, a fin <strong>de</strong> que seamos admitidos en esta tan gran<strong>de</strong> y<br />
dichosa compañía <strong>de</strong> los Santos, y una vez admitidos perseveremos en el<strong>la</strong> constantísimamente, dando gracias<br />
a Dios Padre que nos hizo dignos <strong>de</strong> participar <strong>la</strong> suerte <strong>de</strong> los Santos por <strong>la</strong> luz <strong>de</strong> <strong>la</strong> fe.<br />
XXIV. En qué consiste <strong>la</strong> Comunión <strong>de</strong> los Santos.<br />
157. Primeramente se ha <strong>de</strong> enseñar a los fieles que este artículo es como una explicación <strong>de</strong>l prece<strong>de</strong>nte<br />
en el cual confesamos una Santa Iglesia Católica.<br />
Porque como es uno solo el Espíritu Santo que <strong>la</strong> rige, esta unidad hace que todo cuanto el<strong>la</strong> ha recibido<br />
sea común a todos. Y así a todos los fieles pertenece igualmente el fruto <strong>de</strong> todos los Sacramentos con los cuales<br />
se en<strong>la</strong>zan y unen con Cristo, como con unos sagrados <strong>la</strong>zos, y mayormente con el Bautismo que es como<br />
puerta por don<strong>de</strong> entramos en <strong>la</strong> Iglesia. Y que por esta comunión <strong>de</strong> los santos se <strong>de</strong>ba enten<strong>de</strong>r <strong>la</strong> comunión<br />
<strong>de</strong> los Sacramentos, lo dan a enten<strong>de</strong>r los Padres en el Credo por aquel<strong>la</strong>s pa<strong>la</strong>bras: “Confieso un solo<br />
Bautismo”. Al bautismo se sigue primeramente <strong>la</strong> Eucaristía, y <strong>de</strong>spués todos los <strong>de</strong>más sacramentos, pues<br />
aunque todos ellos causan esta unión juntándonos con Dios, y nos hacen participantes <strong>de</strong> su ser por <strong>la</strong> gracia<br />
que recibimos en ellos, con todo, es más propio <strong>de</strong> <strong>la</strong> Eucaristía, <strong>la</strong> cual más particu<strong>la</strong>rmente hace esta<br />
comunión.<br />
XXV. En <strong>la</strong> Iglesia hay participación <strong>de</strong> merecimientos.<br />
158. También se <strong>de</strong>be consi<strong>de</strong>rar otra comunión que hay en <strong>la</strong> Iglesia. Esta consiste en que todo cuanto<br />
uno merece por <strong>la</strong>s obras <strong>de</strong> virtud y santidad, pertenece a todos, pues <strong>la</strong> caridad, que no busca sus intereses,<br />
hace que a todos interese. Esto se prueba por el testimonio <strong>de</strong> San Ambrosio, quien exponiendo aquel lugar <strong>de</strong>l<br />
Salmo: “Yo soy participante <strong>de</strong> todos los que te temen”, dice así: “A <strong>la</strong> manera que <strong>de</strong>cimos que el miembro es<br />
participante <strong>de</strong> todo el cuerpo, así también lo es el que está junto como miembro con todos los que temen a<br />
Dios. Por lo cual, cuando Cristo nos or<strong>de</strong>nó el modo <strong>de</strong> orar, quiso que dijéramos: el pan nuestro, no mío, y<br />
todo lo <strong>de</strong>más a este modo, mirando no so<strong>la</strong>mente por nosotros, sino por <strong>la</strong> salvación y utilidad <strong>de</strong> todos”.<br />
También, <strong>la</strong>s santas Escrituras <strong>de</strong>c<strong>la</strong>ran muchas veces esta comunicación <strong>de</strong> bienes que hay en <strong>la</strong> Iglesia<br />
con <strong>la</strong> muy propia semejanza <strong>de</strong> los miembros <strong>de</strong>l cuerpo humano. Porque en el cuerpo hay muchos miembros,<br />
y con todo, constituyen un solo cuerpo, en el cual no todos ejercen un mismo oficio, sino cada uno el suyo<br />
propio. Ni todos son igualmente dignos y útiles, ni se ocupan en oficios igualmente honrosos, ni está <strong>de</strong>dicado<br />
cada uno a <strong>la</strong> propia utilidad, sino todos a <strong>la</strong> utilidad y beneficio <strong>de</strong>l cuerpo. A<strong>de</strong>más <strong>de</strong> esto, todos ellos están<br />
tan en<strong>la</strong>zados y unidos entre sí, que si uno solo pa<strong>de</strong>ce algún dolor, todos por el parentesco y conformidad<br />
natural lo experimenten. Y si al contrario está uno muy fuerte y vigoroso todos se alegran. Lo propio suce<strong>de</strong> en<br />
<strong>la</strong> Iglesia: pues aunque en el<strong>la</strong> hay diversos miembros, es a saber varias naciones, <strong>de</strong> Judíos, gentiles, libres y<br />
esc<strong>la</strong>vos, pobres y ricos, mas cuando son bautizados, todos se hacen un cuerpo con Cristo, cuya Cabeza es El 395 .<br />
393 “Ut et vos societatem habeatis nobiscum, et societas nostra sit cum Pater, et cum Filio eius Jesu Christo.” I, Joan, I, 3.<br />
394 “Sicut enim in uno corpore multa membra habemus, omnia autem membra non eum<strong>de</strong>m actum habent: ita multi<br />
unum corpus sumus in Christo, singuli autem alter alterius membra.” Rom., XII, 4, 5. “Sicut enim corpus unum est, et<br />
membra habet multa, omnia autem membra corporis cum sint multa, unum tamen corpus sunt: ita et Christus.” I,<br />
Corint., XII, 12. “Veritatem autem facientes in charitate, crescamus in illo per omnia, qui est caput Christus: ex quo<br />
totum corpus compactum, et connexum per omnem iuncturam subministrationis, secundum operationem in mensuram<br />
unius cuiusque membri, augmentum corporis facit in aedificationem sui in charitate.” Ephes., IV, 15, 16.<br />
San Juan Crisóstomo dice sobre <strong>la</strong> comunión <strong>de</strong> los santos: ―Nosotros somos los pies, mas los mártires son <strong>la</strong> cabeza. Pero<br />
no pue<strong>de</strong> <strong>la</strong> cabeza <strong>de</strong>cir a los pies: no necesito <strong>de</strong> vosotros. Hay miembros más gloriosos, cuya excelencia no les hace<br />
extraños a <strong>la</strong> unión que tienen con <strong>la</strong>s <strong>de</strong>más partes. Ya que entonces se hacen más gloriosos cuando no se oponen a <strong>la</strong><br />
unión que tienen con nosotros. Y asi el ojo, que es <strong>la</strong> parte más resp<strong>la</strong>n<strong>de</strong>ciente <strong>de</strong>l cuerpo, entonces conserva su gloria<br />
cuando no se separa <strong>de</strong>l cuerpo. ¿Y qué digo <strong>de</strong> los mártires? Si el mismo Señor no se avergonzó <strong>de</strong> hacerse nuestra<br />
cabeza, con mucha más razón ellos no se avergüenzan <strong>de</strong> ser miembros nuestros, pues tienen muy arraigada <strong>la</strong> caridad.<br />
Ahora bien; <strong>la</strong> caridad suele unir lo separado, ni se preocupa mucho <strong>de</strong> <strong>la</strong> dignidad.‖ Mom. in s. Romanum M, n. 1. Ex S.<br />
Joann. Chrisos.<br />
395 “Et ipsum <strong>de</strong>dit caput supra omnem ecclesiam.” Ephes., I, 22. “Et ipse est caput corporis ecclesiae.” Coloss., I, 18.<br />
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